BARBADOS-TRINIDAD Y TOBAGO: Guerra comercial

La disputa por derechos de pesca que enfrenta a Barbados con Trinidad y Tobago desde hace 20 años empeoró con el anuncio de represalias de Bridgetown, mientras persiste en el segundo de los dos países la incertidumbre política ante el empate electoral entre el oficialismo y la oposición.

El primer ministro de Barbados, Owen Arthur, amenazó a Trinidad y Tobago con represalias económicas, como reacción ante el arresto de dos pescadores barbadenses. Barbados y Trinidad y Tobago discuten hace dos años un tratado de pesca, sin alcanzar acuerdo.

Arthur también advirtió que aplicará la Ley de Inmigración para expulsar a inmigrantes trinitarios indocumentados, y sugirió la revisión de los derechos concedidos a la compañía nacional de aviación de Trinidad y Tobago, BWIA.

El deterioro de las relaciones entre los dos países, que tienen un fuerte peso económico en la Comunidad del Caribe, de 15 integrantes, puede postergar la creación del proyectado mercado común regional, una iniciativa cuya coordinación está en manos del primer ministro de Barbados.

La disputa comercial se produjo en momentos en que los trinitarios aguardan una definición política tras las elecciones del 10 de este mes, en que los dos principales partidos políticos obtuvieron 18 escaños cada uno en un parlamento de 36 miembros.

El primer ministro de Trinidad y Tobago, Basdeo Panday, y el líder opositor Patrick Manning acordaron el fin de semana trabajar conjuntamente en el parlamento en áreas legislativas clave, aunque no formarán un gobierno de coalición.

Ambos resolvieron dejar en manos del presidente, Arthur N. Robinson, la designación de alguno de ellos como jefe de gobierno y se comprometieron a aceptar la decisión como definitiva.

La disputa con Barbados será probablemente uno de los principales problemas para el nuevo primer ministro.

Las autoridades de Trinidad y Tobago sostienen que los dos pescadores barbadenses detenidos a principios de este mes operaban ilegalmente en aguas territoriales trinitarias.

El episodio ocurrió poco después de que Arthur y Panday dispusieran un plan para impulsar las negociaciones sobre pesca, un asunto que ha sido fuente de discordia durante 20 años.

El embajador de Trinidad y Tobago ante la Caricom, Kamaluddin Mohammed, que espera mantener conversaciones con Bridgetown esta semana, se declaró «consciente de la frustración y la molestia del gobierno de Barbados a consecuencia del arresto».

Mohammed reconoció que la Comisión de Demarcación de Límites Marítimos, creada para resolver la disputa por la pesca, no se reúne desde hace meses a causa de la situación política en Trinidad y Tobago, y tampoco tiene fecha para reanudar su tarea.

El embajador señaló que el trabajo de la Comisión de Demarcación está también obstaculizado por otros factores, entre los que mencionó discrepancias en la interpretación de algunos capítulos de las leyes marítimas internacionales.

El presidente de la Cámara de Industria y Comercio de Trinidad y Tobago, Raoul John, observó que Barbados es un mercado importante para productos trinitarios.

Las exportaciones de Barbados a Trinidad y Tobago cayeron de 39,5 millones de dólares en 1982 a 30 millones en 2000. Por su parte, Trinidad exportó a Barbados bienes y servicios por 150 millones de dólares el año pasado.

Trinidad y Tobago, gran exportador de productos derivados del petróleo, ha disfrutado de una balanza comercial positiva con los países de la Caricom.

Durante los siete primeros meses de este año, las exportaciones de Trinidad y Tobago crecieron 12,5 por ciento, hasta poco más de 600 millones de dólares, mientras que sus importaciones cayeron 13,3 por ciento, para situarse en poco más de 72 millones de dólares.

El gobierno barbadense denunció a Trinidad y Tobago por entregar licencias a pescadores taiwaneses que luego exportan el pescado a Barbados como si fuera un producto trinitario, para beneficiarse del tratamiento preferencial previsto por los acuerdos de la Caricom.

Arthur también criticó a Puerto España a causa de un convenio bilateral de comercio con Costa Rica, por considerar que viola el tratado de la Caricom y perjudica las exportaciones del Caribe a Trinidad y Tobago.

El primer ministro afirmó que, con sus acciones, Trinidad y Tobago demuestra que no está dispuesto a «respetar las obligaciones que le impone la Caricom».

Agregó que Barbados investigará la participación en su mercado de los productos procedentes de Trinidad y Tobago, para imponer luego cláusulas de salvaguardia a los que superen 20 por ciento del total en su clase.

Barbados y Trinidad y Tobago se enfrentan también por la delimitación de la zona económica exclusiva de 70 millas marinas de Barbados, que fue objetada por Trinidad y Tobago. Arthur anunció que llevará el asunto ante la Caricom.

Las disputas con Trinidad y Tobago son «una prueba, que determinará si tendremos un mercado común» en el Caribe, advirtió Arthur.(FIN/IPS/tra-en/pr/cr/lp-ff/if ip/01

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe