La empresa transnacional estadounidense Baxter pagó este miércoles indemnizaciones por la muerte en España de nueve personas que recibían tratamiento de hemodiálisis en sus máquinas con membrana de la serie Althane.
Baxter espera de esta manera detener los procesos iniciados en juzgados de Madrid y de Valencia, ciudad ubicada en la costa del mar Mediterráneo, a 352 kilómetros de la capital, por familiares de 10 personas que fallecieron en agosto, cuando eran tratadas por enfermedades renales.
La empresa abonó este mismo miércoles las indemnizaciones a nueve de las 10 familias, pero el monto no fue revelado en atención al pacto de confidencialidad acordado por las partes.
Las negociaciones con los familiares de la décima víctima todavía no han finalizado.
Manuel Mata, abogado de nueve de las familias afectadas, dijo que ninguna cantidad de dinero puede sustituir a una vida humana, pero que con seguridad contribuye a mitigar el dolor, aunque sea en parte.
En términos similares se pronunció el presidente de Baxter, Harry Jansen Kraemer, a través de un comunicado distribuido este miércoles.
Kraemer señaló en el texto que, «aunque nada de lo que hagamos pueda suplir la pérdida que han sufrido estas familias, entendemos su necesidad de poner fin a esta tragedia».
«Esperamos que el acuerdo ayude a mitigar el dolor de las familias involucradas», añadió.
Las familias indemnizadas, tras el acuerdo y la recepción del dinero, se han retirado de los procedimientos judiciales en marcha, pero la fiscalía y otras administraciones continuarán adelante, informó Mata.
Incluso, si se llegará a un acuerdo con la décima familia, el fiscal y la dirección de los hospitales en los que eran atendidos los pacientes podrían mantener su acusación, indicaron fuentes judiciales.
La negociación finalizó con el acuerdo apenas tres semanas después de que la compañía estadounidense comunicara haber identificado «un probable vínculo entre sus dializadores Althane y algunos fallecimientos de pacientes».
En esa oportunidad y después de que Baxter y autoridades de países en los que se registraron casos similares investigaran acerca de los fallecimientos no explicados de pacientes en hemodiálisis, la firma admitió que un fluido utilizado en el proceso de fabricación podría ser la causa de algunos de esas muertes.
La hemodiálisis es un proceso médico por el cual se hace pasar la sangre a través de membranas semipermeables para liberarlas de productos nocivos como la urea, que es la materia predominante en la orina.
Baxter también anunció que abandonará definitivamente la producción de los dializadores Althane, que ya había retirado del mercado tras las investigaciones propias y de terceros que siguieron a los primeros fallecimientos de pacientes.
Mata reconoció el viernes pasado que se estaban manteniendo conversaciones con la empresa transnacional desde el momento mismo en que se inició el juicio en Valencia.
También señaló ese día que seguirían conversando, pero no dio ningún indicio que permitiera suponer que el acuerdo llegaría tan rápido.
Por otro lado, fuentes de los Tribunales de Justicia, que pidieron reserva sobre su identidad, mostraron una «gran sorpresa» al conocer el acuerdo, por el hecho de que se indemnice a las familias de los fallecidos sin que se haya podido investigar en algunos casos la causa de las muertes.
Salvador Sastre, abogado de la Asociación para la Lucha contra las Enfermedades de Riñón (Alcer), también parte en los juicios, no contestó cuando se le preguntó si la compañía reconoció de manera expresa su responsabilidad en las muertes.
El letrado comentó que la negociación fue muy difícil y mencionó que uno de los obstáculos más serios ha sido la repercusión del caso en los medios de comunicación.
Esa divulgación, agregó, abriría la posibilidad de que se produjeran actuaciones en tribunales de otros países, donde también se registraron casos fatales.
No obstante, apuntó que Alcer continuará por el momento actuando como acción popular en el procedimiento que se sigue en el juzgado de Instrucción número siete de Valencia, ya que no habrá un archivo automático de las actuaciones. Es decir que, pese al acuerdo, la justicia podrá proseguir sus actuaciones al respecto.
En la causa abierta ante el juzgado de Valencia figuran como imputados ocho directivos de Baxter. Cuatro de ellos ya prestaron declaración y los restantes están citados para hacerlo entre el 17 y el 20 de diciembre, según las mismas fuentes judiciales. (FIN/IPS/td/dm/he/01
