Diez jóvenes sudafricanos desconocidos entre sí convivieron en una zona inhóspita durante 18 días, en el marco de un programa de televisión semejante al estadounidense «Survivor» producido por una organización de lucha contra el sida.
El primero de los 13 capítulos que componen la serie «S'camto Ground Breakers» («Dejemos hablar a los pioneros»), ya grabados en la meridional provincia de El Cabo Oriental, se emitió el miércoles.
Love Life, la institución que produce del programa, es la mayor organización sudafricana de campañas públicas contra el sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida), y sus integrantes esperan que el programa inspire a los jóvenes a protegerse.
La organización, cuya Junta de Asesores es encabezada por la esposa del presidente Thabo Mbeki, Zanele Mbeki, anunció que los 10 participantes asumieron «los desafíos de la autorrealización y el trabajo en equipo, del conflicto y el triunfo, de la competición y la compasión, de la diversidad y la ambición».
Aprovechando la popularidad del género denominado «televisión realidad», que registra la conducta de grupos humanos en situación de aislamiento, «S'camto Grond Breakers» está concebida para demostrar a la juventud sudafricana lo que puede lograr si actúa con conciencia.
La producción del programa también aspira a enseñar simples habilidades vitales, como asumir decisiones responsables y con la información adecuada.
Al igual que en «Survivor», los 10 jóvenes, procedentes de diversas zonas del país, fueron divididos en dos equipos enfrentados en competencias de disciplinas como canotaje, ciclismo de montaña y descenso con cuerdas por pendientes rocosas.
Pero, en un detalle original, los participantes también debieron responder interrogantes: ¿Qué significa ser yo mismo? ¿Qué significa ganar? ¿Qué es más importante, la suerte del individuo o la del equipo?
El grupo ganador de cada prueba recibía alimentos y otros materiales necesarios para sobrevivir en condiciones inhóspitas.
Varios jóvenes sudafricanos, tres de los cuales participaron de la serie, acompañarán a la directora de Love Life, Judi Nwokedi, en la sesión especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre VIH (virus de inmunodeficiencia humana) y sida, los días 25, 26 y 27 en Nueva York.
«Queremos dar al mundo la oportunidad de ver cómo los jóvenes sudafricanos comparten su visión del futuro del país y de entender por qué su optimismo marca una diferencia en la lucha contra el sida», sostuvo Nwokedi.
Love Life reveló en mayo un estudio según el cual la juventud sudafricana es extremadamente optimista sobre su futuro, mucho más que las de otros países del mundo. A pesar de eso, temen que la epidemia de sida destruya sus vidas y el futuro del país.
El peligro de contraer la enfermedad, así como su impacto en los amigos, las familias y el país son una de las grandes preocupaciones de la población joven.
Los creadores de la serie esperan capitalizar ese optimismo y esa preocupación para alentar a los jóvenes a elegir un estilo de vida que los proteja del sida.
«Si la población joven y adolescente tiene modelos positivos y objetivos claros, podrá cambiar su conducta y proteger su futuro. Si corren riesgos, como todos los jóvenes, que al menos sean decisiones informadas y conscientes», explicó Nwokedi.
Más de 40 por ciento de los de 40 millones de habitantes de Sudáfrica tienen menos de 15 años.
De mantenerse la actual incidencia de la infección, más de la mitad de esos niños, niñas y adolescentes podrían morir a causa del sida en los próximos cinco a diez años.
Muchos jóvenes sudafricanos tienen su primera experiencia sexual aproximadamente a los 15 años. Esa primera relación podría contagiar el VIH a un tercio de esos jóvenes.
Según datos del Programa Conjunto de Naciones Unidas para el VIH/Sida (Onusida), 4,1 millones de sudafricanos de entre 15 y 49 años son portadores del virus. Pero «toda la juventud está en peligro. Si hoy (los exámenes) son negativos, mañana pueden ser positivos», explicó Nwokedi.
Si bien la mayoría de los jóvenes afirman reconocer la importancia de ser responsables y de protegerse del virus, muchos aún ignoran hechos clave sobre la prevención y tratamiento de la enfermedad.
Según el informe, muchos adolescentes sexualmente activos asumen conductas sexuales arriesgadas presionados por sus pares.
El estudio, para el cual se realizaron encuestas entre jóvenes de 15 a 17 años, también revela que el crimen, la violencia y el abuso contra la población joven constituyen una gran preocupación. Un tercio de los entrevistados aseguraron haber padecido hambre y habitar viviendas inapropiadas.
La organización Love Life intenta que esta campaña sea una influencia positiva en la conducta sexual adolescente, con el fin de reducir el embarazo adolescente, el sida y otras enfermedades de trasmisión sexual. (FIN(IPS/tra-en/ps/cr/dc-mj/cr/01
