En la víspera de su viaje en misión de paz al Medio Oriente, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, confirmó hoy que Israel cumplió con la resolución 425 del Consejo de Seguridad al retirarse completamente de Líbano.
"El pueblo de Líbano esperó más de 22 años por este momento. Todos debemos admirar la fortaleza con que soportaron esta larga ordalía", declaró Annan a la prensa este viernes.
Mientras este "es un día de felicidad" para Líbano e Israel, también es un "día de esperanza para el Medio Oriente en general.
"Y es un día de orgullo para las Naciones Unidas porque muestra que las resoluciones de la ONU, cuando se implementan completamente por todas las partes trabajando en conjunto, pueden ser bloques de construcción para la paz", afirmó.
La resolución 425, que pedía el retiro israelí de Líbano, es una de las pocas resoluciones de la ONU referidas a Israel que éste aplicó en su totalidad.
Las otras resoluciones, conocidas como 242 y 338, también incluyen el principio de "tierra por paz", pero aún no se acataron.
Annan dijo que espera que los pueblos de la región, sobre todo sirios, palestinos e israelíes, así como los libaneses, vean la aplicación de la resolución 425 como un estímulo para acelerar la negociación de la paz basada las dos resoluciones restantes.
Annan se reunirá con líderes de Medio Oriente para "ver lo que la ONU puede hacer para consolidar y construir sobre el logro" de este viernes, agregó.
"No es el fin del largo camino hacia la paz en la región, pero espero que se vea como el comienzo del fin", dijo.
El embajador Aaron Jacob, de Israel, dijo a la prensa este viernes que su país se retiró "rápidamente y con el mayor respeto por la vida humana".
"El gobierno de Líbano debe asumir la responsabilidad de la zona, y asegurar que no se use para lanzar ataques terroristas contra Israel", advirtió.
En Beirut, el presidente libanés Emile Lahoud dijo que su país considerará que el retiro israelí es incompleto si se mide según una "línea ficticia, inexistente" y si "no se extiende a la frontera reconocida que… es conocida por la ONU y los países involucrados".
"Líbano exige la implementación total, en letra y espíritu, de la resolución 425", declaró.
En marzo de 1978, Israel invadió Líbano en venganza por un ataque guerrillero de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en territorio israelí.
En ese entonces, la OLP operaba fuera de Líbano. Israel ocupó una zona al sur del río Litani.
En ese mes, el Consejo de Seguridad adoptó la resolución 425 (1978), exigiendo el riguroso respeto de la integridad territorial, la soberanía y la independencia política de Líbano.
El Consejo solicitó a Israel el retiro de sus fuerzas en Líbano y también creó la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en Líbano (Unifil).
En un informe dirigido al Consejo de Seguridad la semana pasada, Annan dijo que las fuerzas de paz de la ONU sirvieron a Líbano durante los últimos 22 años, uno de los lapsos más largos de cualquier fuerza de paz. Unifil está integrada actualmente por 4.483 soldados.
Entre 1975 y 1990, Líbano experimentó una destructiva guerra civil que destruyó 25.000 millones de dólares en infraestructura.
La economía libanesa repuntó entre 1992 y 1995, con un crecimiento anual promedio de siete por ciento. Sin embargo, en 1996 la expansión descendió a cuatro por ciento, y en 1997 a 3,8 por ciento.
Una de las razones de la reducción fue el bombardeo de Líbano por fuerzas israelíes durante 17 días en abril de 1996. Los bombardeos reforzaron los temores de inestabilidad económica y política en un país que lucha por escapar del caos creado por la guerra.
Los israelíes atacaron específicamente dos plantas de energía eléctrica y la red de telecomunicaciones del país. El daño se calculó en 200 millones de dólares.
Líbano pretende una inversión extranjera de 60.000 millones de dólares para recuperar su economía. (FIN/IPS/tra-en/td/da/aq/ip/00
