Una nueva etapa en el largo camino de regreso de Elián González a Cuba finalizó hoy en Estados Unidos, cuando un tribunal federal de apelaciones confirmó el rechazo de la petición de audiencia de asilo presentada por los familiares del niño en Miami.
Los tres jueces del tribunal de apelaciones en Atlanta decidieron por unanimidad que la petición de asilo firmada por Elián cuando aún vivía con familiares en Miami no sirve como base para la convocatoria de una audiencia en el Servicio de Inmigración y Naturalización estadounidense (INS).
El tribunal sostuvo que la decisión del INS de reconocer sólo a un padre la capacidad de gestionar el asilo político en nombre de un niño de seis años no es "irracional, caprichoso ni arbitraria, sino razonada y razonable", según la sentencia.
"El INS no abusó de sus funciones ni actuó con arbitrariedad al (…) rechazar la solicitud de asilo", agregó.
El caso de Elián González se convirtió en una disputa entre el gobierno de Fidel Castro y exiliados cubanos en Miami opositores a ultranza del régimen en la isla. El gobierno de Bill Clinton respaldó la devolución del niño a Juan Miguel González, su padre residente en Cuba.
Elián, cuyos padres estaban divorciados, fue llevado por su madre, Elizabeth Brotons, y el novio de ésta a una pequeña embarcación rumbo Estados Unidos a través del estrecho de Florida a fines de noviembre, sin conocimiento de Juan Miguel González.
El bote se precipitó al mar y Brotons murió, al igual que otros nueve pasajeros. Elián, uno de los tres sobrevivientes, fue hallado cerca de la costa de Florida flotando sobre un neumático. Tras una breve estancia en un hospital en Miami, fue entregado a Lázaro González, un tío de su padre residente en Miami.
Los familiares de Elián en Miami indicaron que apelarán el fallo, que prohíbe al niño abandonar suelo estadounidense por 14 días, mientras los demandantes preparan su próxima acción judicial. El caso podría acabar en la Suprema Corte de Justicia.
La sentencia de este jueves reproduce los argumentos del juez K. Michael Moore, quien consideró la concesión de asilo una función exclusiva de la Fiscalía General estadounidense.
El INS depende de la secretaria de Justicia (fiscal general) Janet Reno, quien ha afirmado desde el comienzo del caso que el niño debe retornar con su padre.
Juan Miguel González viajó a Estados Unidos el 6 de abril y dos semanas después logró la custodia de su hijo, luego de que agentes federales armados irrumpieron en la vivienda de Lázaro González.
Poco antes de ese episodio decisivo, Reno procuró sin éxito intervenir en persona, y trató de que el tío abuelo del niño lo entregara por su propia voluntad a su padre.
Luego de la operación en la vivienda de Lázaro González, Juan Miguel González y su hijo fueron conducidos por agentes federales a una granja del gobierno a una hora de distancia de Washington. Las autoridades admitieron que profesores, primos y compañeros de clase del niño cubano lo visitaran.
La semana pasada, la comitiva se trasladó a un predio en Washington cercano a la casa del abogado de Juan Miguel González, Gregory Craig, quien había defendido en 1998 al presidente Bill Clinton en las audiencias de juicio político.
Juan Miguel González, respaldado por el gobierno de Cuba, había reclamado en noviembre el regreso inmediato de Elián a su país, pero no fue hasta enero que el INS ordenó la devolución del niño a su padre. La decisión fue respaldada por el presidente Clinton.
Pero los familiares de Lázaro González reclamaron ante un tribunal federal en Miami la posibilidad de que Elián solicitara asilo político en Estados Unidos.
La poderosa Fundación Nacional Cubano-Americana ayudó a la familia de Lázaro González a pagar los gastos legales, a diseñar su estrategia de relaciones públicas y a negociar con Reno y con el Departamento de Justicia.
La familia, sus abogados y sus portavoces argumentaron que el retorno de Elián a Cuba no beneficiará al niño, pues crecerá en un país comunista donde sus oportunidades y su libertad tendrán restricciones que no sufriría en Estados Unidos.
También sostuvieron que la vuelta a la isla traicionaría los deseos de Brotons, y agregaron que Elián desarrolló lazos muy estrechos con su prima Marisleysis González, hija de Lázaro de 21 años, quien en Miami se desempeñó como una especie de "madre sustituta" del menor.
Luego, los familiares en Miami declararon que Juan Miguel González no era un buen padre y que había golpeado a Brotons, y facilitaron a los canales de televisión estadounidenses una grabación en vídeo en que Elián decía a su padre que no deseaba retornar a Cuba.
La casa de Lázaro González, en el corazón del barrio Pequeña Habana de Miami, se convirtió en el escenario de manifestaciones diarias contra Castro, Clinton y Reno, aprovechadas por las autoridades locales en su puja con el gobierno federal.
El propio Elián fue puesto a desfilar todos los días y noches frente a los manifestantes y a las cámaras de televisión. Los opositores más extremistas a Castro se comprometieron a resistir por medios violentos cualquier medida dirigida a la devolución del niño a su padre.
Hasta el 1 de mayo, las tres principales cadenas noticiosas de televisión dedicaron 485 minutos al caso, lo cual lo convirtió en la noticia más destacada de este año. Las elecciones primarias de los partidos Demócrata y Republicano insumieron, en conjunto, 486 minutos, según el informe especializado Tyndall.
La cobertura de los medios de comunicación no fue favorable a los familiares de Elián en Miami, y la opinión pública también manifestó en las encuestas una creciente antipatía hacia la causa de Lázaro González. Dos tercios de los estadounidenses respaldaron la devolución del niño a su padre, según los sondeos.
Al mismo tiempo, los anticastristas de línea dura perdían capacidad de presión en el ámbito político de Washington, en gran parte debido al caso Elián, según los observadores.
El mes pasado, a pesar de intensos cabildeos, un comité de la Cámara de Representantes dio el primer paso hacia el levantamiento del embargo contra Cuba, que ya lleva 39 años, para la venta de alimentos y medicinas a la isla. El año pasado, el mismo comité había rechazado la propuesta por un amplio margen. (FIN/IPS/tra- eng/jl/mj/ip hd/00