Don Drummond es recordado como uno de los grandes músicos de Jamaica y, aunque fue considerado uno de los cinco mayores trombonistas de su época, es más conocido por el trágico incidente que truncó su carrera en 1965.
Víctima de caídas depresivas, Drummond asesinó a su amante el día de Año Nuevo, poniendo fin a una breve y brillante carrera. Miembro fundador de la banda Skatalites, el artista murió en 1969 en el asilo Bellevue donde fue recluido por demencia criminal.
Su genialidad como músico empalideció tras el asesinato, pero la Universidad de las Antillas intenta rectificar la situación y quiere presentar su obra a un nuevo público mediante una conferencia basada en los logros de Drummond.
El Departamento de Estudios sobre Reggae de la Universidad lanzará un ensayo sobre Drummond en el campus Mona, de Kingston, el 6 de mayo, en ocasión del 31 aniversario de la muerte del trombonista.
El estudio será el primer paso importante del departamento que, desde su creación hace cinco años, realizó diversos seminarios y conferencias, en su mayor parte acerca de la influencia del reggae como fuerza social.
La decisión de incursionar en la leyenda de Drummond es uno de los primeros intentos de la Universidad de estudiar el aporte de los músicos jamaiquinos.
"Drummond es un personaje muy precoz en la historia de la música jamaiquina", comentó Carolyne Cooper, titular de la Unidad sobre Estudios de Reggae. "Es un pionero y muchos de ellos, comúnmente, fueron dejados de lado".
Según Cooper, la historia de Drummond es uno de los primeros pasos para llevar la labor del departamento a otro nivel. No pudieron haber comenzado con una personalidad más compleja.
Drummond nació en Allman Town, una comunidad obrera al este de Kingston, en 1932. No se sabe mucho de su familia pero fue criado en la vecina Alpha Boys Home, una guardería de donde salieron algunos músicos notables.
Muchos colegas de Drummond también estuvieron en Alpha y algunos de ellos también integraron Skatalites. Junto con otros graduados, se hizo conocer en el ambiente musical de Kingston de los años 50, fuertemente influido por el jazz estadounidense y la explosión del swing.
A fines de esa década Drummond ya era considerado un genio por sus pares no sólo como trombonista sino también como compositor. Fue en esa época que J.J. Johnson, el respetado trombonista estadounidense, calificó al jamaiquino entre los cinco mejores instrumentistas del mundo.
Como muchos otros músicos jamaiquinos del momento, Drummond cayó bajo el impulso del creciente movimiento rastafari que cobró raíces en Kingston.
Sus temas originales "Addis Ababa" y "Lejano Oriente" reflejaron las creencias de la religión rastafariana y fueron éxitos instantáneos para los Skatalites.
La banda estuvo integrada por figuras legendarias como los saxofonistas Tommy McCook y Roland Alphonso.
A pesar de sus dotes notables, Drummond también tuvo su lado oscuro. Solitario, fue enviado dos veces a Bellevue antes del asesinato. Pero su vida personal cambió cuando conoció a Anita Mahfood.
Hija de una conocida familia de comerciantes que traficaban con Medio Oriente, Anita se ganó la vida como bailarina exótica y se hizo popular bajo el seudónimo de Margarita. Cuando conoció a Drummond, estaba casada con Rudolph Bent, un boxeador de Honduras Británica.
Su historia de amor con Drummond nació a comienzos de los años 60 y concluyó en tragedia en la madrugada del 1 de enero de 1965 cuando el músico hundió un cuchillo en el corazón de Mahfood en su casa de Kingston.
El crimen dejó en plano sus dotes de trombonista, así como su aporte al ska, el antecedente del reggae.
En los últimos años, Drummond ha fascinado a una nueva generación de amantes de la música, sobre todo gracias al resurgimiento del interés en el ska en Europa y Estados Unidos. Su obra con los Skatalites ha aparecido en nuevas ediciones de álbumes lanzados por Discos Heartbeat, en Estados Unidos.
En 1998, Island Films manifestó su interés de realizar una película sobre su vida y el trombonista estadounidense Dalfayo Marsalis, de la famosa familia del jazz Marsalis, visitó Kingston el año pasado para interiorizarse sobre su obra. (FIN/IPS/tra-en/hc/da/ego/aq/cr/00