Más de la mitad de las mujeres que se someten a abortos en Indonesia mueren a causa de la intervención, que es ilegal y rechazada por la sociedad de mayoría musulmana, según estimaciones de expertos indonesios y del Fondo de las Naciones Unidas para la Población (FNUAP).
Los expertos estiman que entre 750.000 y un millón de indonesias murieron a causa de abortos sólo el año pasado, pero las cifras son muy inciertas porque se supone que la práctica no existe, señaló Budi Utomo, director del Centro de Investigación sobre Salud.
Cada año se realizan entre 1,3 y 1,45 millones de abortos en este país asiático de 200 millones de habitantes, afirmó Nesim Tumkaya, representante del FNUAP en Indonesia.
De los datos anteriores se desprende que más de 50 por ciento de las mujeres que se someten a abortos mueren debido al procedimiento.
Como el aborto es ilegal, la práctica "no puede ser controlada", y en general es practicada por comadronas tradicionales o por médicos sin experiencia, cuya ineptitud o métodos cuestionables ponen en peligro la vida de sus pacientes, señaló Budi.
En varias aldeas de la provincia de Java Occidental, por ejemplo, muchas parteras se especializan en "perforasi", un tipo de aborto en que la cabeza del feto, en general con seis meses de gestación, es perforada con una horquilla dentro del útero. A veces, la cabeza es arrancada con una faja de género.
Tales métodos, realizados en pésimas condiciones de higiene, a menudo causan complicaciones como hemorragias y todo tipo de infecciones.
Las estadísticas oficiales indican que 19.000 mujeres mueren cada año de complicaciones "maternas", y la hemorragia es la principal causa de muerte (46,7 por ciento).
La eclampsia o las convulsiones durante el embarazo o el parto figuran en segundo lugar (14,5 por ciento), y las infecciones en tercer lugar (ocho por ciento).
Aunque estas cifras parecen subestimar mucho la realidad, algunos expertos creen que las causas de muerte citadas se relacionan más con los abortos que con los partos a término.
Llamativamente, 98,8 por ciento de los abortos se realizan en mujeres casadas, según estadísticas del Consejo de Población de Yakarta, elaboradas en base a datos obtenidos de centros médicos públicos y privados entre 1997 y 1998.
El principal motivo citado por las mujeres, que en general ya tenían al menos un hijo, fueron las dificultades económicas. Muchas temían simplemente no poder criar al hijo que esperaban.
La alta tasa de abortos entre las mujeres casadas podría estar relacionada con el bajo uso de anticonceptivos, especuló Budi, "o el servicio de planificación familiar deja mucho que desear".
Algunas organizaciones sugirieron que los hospitales públicos mejoren sus servicios de planificación familiar, brindando más asesoramiento para evitar tantos abortos.
La alta mortalidad entre las mujeres que se someten a abortos puede tener un impacto muy perjudicial en la salud de los niños que quedan huérfanos, advirtió Budi, quien también es consultor de Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia).
La población de Indonesia es la peor alimentada dentro del sudeste asiático. "No sirve tener buenas escuelas sin una buena nutrición. Sólo los niños bien alimentados pueden aprender", señaló Rieny Hardjono, de la Oficina para la Potenciación de la Mujer.
Mientras, Tumkaya, del FNUAP, opinó que el número de abortos en Indonesia permanecerá alto debido a una variedad de factores, principalmente la crisis económica, la desigualdad de géneros y la ineficacia o inexistencia de servicios de planificación familiar.
El abuso sexual y la violencia doméstica pueden ser causas importantes de aborto, pero como se trata de temas tabú, es difícil obtener cifras confiables al respecto, señaló Tumkaya.
"Mientras las mujeres no tengan control de su fertilidad y su sexualidad, inevitablemente recurrirán al aborto, aunque saben que esta práctica causa numerosas muertes", advirtió. (FIN/IPS/tra- en/ky/ccb/js/mlm/pr-dv/00
