PARAGUAY: Gobierno pierde respaldo político, social y militar

El denominado "gobierno de unidad nacional" de Paraguay se debilita ante la progresiva pérdida de su respaldo político, social y, ahora, también el militar.

En medio de crecientes tensiones políticas y sociales, el gobierno relevó el miércoles de la jefatura del poderoso Estado Mayor Conjunto del Primer Cuerpo de Ejército al coronel Gustavo Piñeiro.

Piñeiro está arrestado junto con 14 oficiales acusados de insubordinación.

El presidente Luis González Macchi quedó mal parado cuando, tras su regreso el domingo de la IX Cumbre Iberoamericana en Cuba, medios de comunicación oficialistas denunciaron un intento de golpe de Estado y no logró reunificar a las diversas fuerzas afines al gobierno en torno a su persona.

La mayoría del cogobernante Partido Liberal Radical Auténtico retirará antes de marzo a sus ministros y lanzará su campaña por la vicepresidencia, lo cual restaría apoyo parlamentario a González Macchi, cuya administración prevé aumento de inflación y problemas de pago para el próximo año.

El oficialista diario Noticias informó de una supuesta conjura para secuestrar al presidente a su llegada a Asunción el domingo, operación que habría dejado al presidente del parlamento, Juan Carlos Galaverna, al frente del gobierno hasta las elecciones.

Noticias también dio cuenta de aparentes molestias militares por traslados y remociones.

El gobierno desmintió de inmediato la operación.

"Creo que no se manejó bien la comunicación, que es una tarea del presidente y (de) las Fuerzas Armadas de la Nación", dijo Galaverna, quien recibió este miércoles la denuncia de que los oviedistas en Buenos Aires prometen el retorno de su líder el 10 de diciembre, fecha del cambio de presidente en Argentina.

Galaverna, quien suple al frente del parlamento a González Macchi desde que éste asumió la Presidencia tras la renuncia del oviedista Raúl Cubas, debió negar este miércoles que intente remover del cargo al jefe de gobierno.

"Con el presidente tengo cuentas claras" afirmó, al tiempo que criticó ese "juego maldito donde el sindicado como conspirador tiene que hablar de ello, aunque las conspiraciones en el mundo moderno son públicas y no con encuentros furtivos en la sombra de la noche".

El proselitismo al que se lanzó Félix Argaña, hijo del asesinado vicepresidente Luis María Argaña que se postulará en el 2000 a la vicepresidencia, provocó molestia en el Partido Colorado, mayoritario en el gobierno.

El presidente de Argentina, Carlos Menem, concedió el asilo a Oviedo el 29 de marzo y luego rechazó el pedido de extradición presentado a fines de agosto por el gobierno paraguayo, lo que derivó en el retiro mutuo de embajadores.

El presidente electo de Argentina, Fernando de la Rúa, prometió dar trámite judicial al pedido, aunque dijo preferir que el gobierno saliente encuentre otro país de destino para Oviedo, ex comandante del Ejército paraguayo, condenado a 10 años de prisión por rebelión en abril de 1996.

Mientras, los funcionarios públicos, cuyos dirigentes fueron convocados a la residencia presidencial el martes a la noche, confirmaron una huelga por tiempo indefinido desde el 1 de diciembre a pesar de que constituyen el tradicional recurso electoral del coloradismo.

Los sindicatos se oponen al plan de privatizaciones y reforma del Estado que acaba de bosquejar el gobierno, pero González Macchi ya les confirmó que empezaría con la telefónica Antelco.

El mandatario dedicó el martes de noche y miércoles de mañana a reunirse con los líderes de todos los partidos para pedirles que permanezcan en el gobierno de unidad, luego de lo cual almorzó con los miembros de la Conferencia Episcopal.

El presidente del Encuentro Nacional, senador Mario Paz Castaing, dijo que "en estos momentos no se dan condiciones para un golpe". "Hoy tenemos la esperanza de que el proceso continúe, aunque falta una hoja de ruta clara a firmar sobre los planes de reforma del Estado", agregó.

Paz opinó que "el presidente tiene liderazgo suficiente, pero falta la voluntad de todos los partidos que tienen sus problemas internos y deben coadyuvar para que los liderazgos políticos se ejerzan y le llevemos tranquilidad a la ciudadanía". (FIN/IPS/cm/mj/ip/99

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