El Foro Y2K de América del Sur, reunido en esta capital, dispuso un operativo de vigilancia para la noche del 31 de diciembre ante el llamado "Efecto 2000" y advirtió que la serenidad de la ciudadanía es fundamental para neutralizar los efectos de esta virtual amenaza informática.
El foro reunió durante jueves y viernes en Santiago a los coordinadores nacionales de los programas de prevención del "Efecto 2000" de Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.
El efecto o crisis del año 2000, denominado Y2K (del inglés "year" y del griego "kilo", por los múltiplos de 1.000), alude a posibles colapsos de programas informáticos basados en la práctica habitual de identificar los años sólo con los dos últimos dígitos.
El paso, entre el 31 de diciembre y el 1 de enero próximos, de 1999 al 2000, implicará que esos programas identifiquen al nuevo año con un doble cero, lo cual puede crear situaciones de crisis en los servicios y actividades productivas.
Se temen, por ejemplo, dificultades en sistemas de cálculo de rentabilidad bancaria y de organismos previsionales, en las reservas de pasajes aéreos y en programas que regulan servicios públicos de teléfonos, electricidad, gas y agua.
El Foro Y2K de América del Sur es financiado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y tiene como coordinador regional a Rodrigo Moraga.
Estas instituciones apoyan los planes y proyectos que se pusieron en marcha en los países sudamericanos para reacondicionar y actualizar programas informáticos y adoptar otras medidas de prevención y nautralización de la posible crisis.
La cooperación internacional posibilitó la contratación de expertos y la presencia en la reunión de Santiago de delegados de países industrializados, como Jacques Grenier, representante del sector transporte en el Centro de Monitoreo y Coordinación 2000 de Canadá.
En Chile se han invertido 1.500 millones de dólares, con porcentajes de solución a la crisis que a fines de octubre se estimaron en 98 por ciento para las telecomunicaciones, 84 en electricidad, 83 en combustibles y 99 por ciento en el sector bancario.
En términos generales se plantea que el grado de cobertura de Chile llegó a 90 por ciento en octubre, con un porcentaje más o menos similar en Argentina, que es el otro país más avanzado de América del Sur en este ámbito.
En la reunión realizada en Santiago se hizo un evaluación positiva de los progresos en los nueve países que integran el foro. Brasil, por razones de idioma, no está adscrito a esta instancia, aunque también lleva a cabo su programa anticrisis.
Carlos Guedes, director de la Oficina de Comunicaciones del BID, resumió el balance de los programas de prevención y neutralizaci=n del "Efecto 2000" en América del Sur, señalando que hoy se tiene una "sensacion mixta".
"Por un lado, hay tranquilidad porque hemos hecho todo lo que está a nuestro alcance y en forma profesional", indicó Guedes. "Pero también hay preocupación, porque se tiene en las manos un problema atípico, sin historia, y donde hay muchos imprevisibles".
En ese sentido, Moraga recalcó que ahora es el turno de los ciudadanos. "El rol principal de ellos es comportarse bien y no actuar en forma desusada, porque esas actitudes psicológicas pueden generar situaciones problemáticas", afirmó.
"Lo importante es que no se difundan mensajes o señales de alarma. Cada ciudadano puede efectuar acciones concretas para disminuir los eventuales impactos (del Efecto 2000) en la vida cotidiana", apuntó el ministro de Planificación y Cooperación de Chile, Germán Quintana.
"Hay que celebrar con tranquilidad el año nuevo y (la gente debe) darse cuenta de que sus autoridades han trabajado y han hecho los esfuerzos necesarios para que todo funcione bien", agregó Quintana, quien presidió este encuentro del foro.
La próxima reunión de este organismo se realizará en febrero del 2000 en una ciudad aún por determinar. "Si somos capaces de reunirnos después del 31 de diciembre, quiere decir que todo salió bien y nuestros esfuerzos valieron la pena", dijo Moraga.
La prueba de fuego será precisamente la noche del día 31, en que los comités nacionales del foro estarán interconectados para detectar cualquier problema que se produzca y trabajar conjuntamente en su solución.
El monitoreo de la transición al año 2000 en América del Sur se realizará mediante un sistema telefónico satelital y la instalación de un sitio espejo del web del Centro de Cooperación Internacional Y2K en Chile.
También se planea establecer un convenio a nivel regional para acceder a los servicios que durante la transición suministrará en tiempo real el Electrical Power Research Institute, acerca del desempeño de los servicios de energía. (FIN/IPS/ggr/ag/if-sc/99
