La capacitación impartida en el marco de un proyecto de desarrollo pesquero de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) contribuyó a aumentar la producción y exportaciones de cinco países de América Latina.
La iniciativa financiada por la FAO con 180.000 dólares se ejecutó a través de Infopesca en Costa Rica, Honduras, México, Nicaragua y República Dominicana, dijo a IPS el veterinario Nelson Avdalov, coordinador de los seminarios de capacitación que se desarrollaron durante un año a partir de marzo de 1997.
Avdalov explicó que el trabajo incluyó el entrenamiento para "desarrollar mercados regionales e internacionales", con el fin de alcanzar "un significativo aumento de la producción pesquera de buena calidad en América Latina y el Caribe".
Las exportaciones de pescado de la región suman unos 5.000 millones de dólares anuales, mientras el comercio mundial del sector alcanza a casi 53.000 millones de dólares, indican las estadísticas de Infopesca
Los principales productores de pescado de América Latina son Chile y Perú, que se ubican entre los siete más importantes del mundo, junto con China, Japón, Estados Unidos, Rusia e Indonesia. El consumo mundial de pescado fue de 23 millones de toneladas en 1994.
El proyecto de la FAO propuso para cumplir con su objetivo, como complemento, "difundir en forma eficaz" las informaciones generales y comerciales, lo cual se concretó a través de Internet.
El plan permitió entrenar a casi 200 personas de las cinco naciones involucradas en el plan mediante seminarios que tuvieron una carga horaria de 40 horas cada uno, totalizando un total de 7.960 horas/hombre de capacitación.
"A través de la formación técnica de las industrias pesqueras se logró que éstas y los sistemas de inspección estatal alcanzaran un nivel de excelencia del cual carecían", y ello permitirá que aumenten el volumen y la calidad de los productos que pescan, afirmó Avdalov.
Infopesca coordinó los trabajos desde su sede regional en Montevideo con instructores uruguayos y brasileños.
"El proyecto permitió a los cinco países latinoamericanos que sus productos pesqueros lleguen a los mercados internacionales con el mismo nivel de calidad que ofrecen las naciones del Norte industrializado", afirmó Avdalov.
No puede afirmarse que el proyecto haya contribuido en forma directa a la creación de fuentes de trabajo, pero "la capacitación, la mejora en la producción y el aumento de las ventas, generan en forma indirecta más recursos humanos y mejores salarios", señaló.
El experto cree que la capacitación es la mejor defensa para la crisis mundial de los recursos pesqueros.
El mejor aprovechamiento de esos recursos solo es posible con la capacitación, porque éstos, pocos o muchos, están en el mar y para aprovechar íntegramente un pescado en su proceso de comercialización, es necesario la formación técnica, afirmó Avdalov.
Indicó que otro aspecto "relevante" en la materia es la información comercial que Infopesca divulga a través de la red de redes de informática, actualizando los precios internacionales de productos pesqueros mediante listas que se renuevan cada 15 días.
"De la nada, al cabo de dos años, ya nos visitaron en nuestra página web (http://www.infopesca.org) 23.678 personas. Ofrecemos información de productos refrigerados vivos, pescados congelados, productos curados, harina, aceite y conservas, entre otros", señaló Avdalov.
Ronald Wiefels, director de Infopesca, dijo a IPS que un aspecto que debe considerar el desarrollo pesquero de América Latina es su propio mercados.
"Los grandes mercados mundiales, como la Unión Europea, Estados Unidos y Japón, sin duda son importantes, pero no lo son menos las grandes ciudades de la región, como Buenos Aires, Sao Paulo, México o Caracas", precisó.
A su juicio, esos mercados se tornan cada vez más atractivos ante el notorio crecimiento del consumo de pescado por persona.
Wiefels agregó que "por esa razón merecen la atención, tanto de los productores de la región como de los productores del resto del mundo, cuyas exportaciones hacia América Latina aumentan cada año".
Puso como ejemplo a las casi 12 millones de personas que habitan Buenos Aires y las localidades ubicadas a su alrededor, que históricamente han sido grandes consumidores de carnes rojas antes que de pescado.
Un estudio realizado por Infopesca en el marco del proyecto con la FAO indica que la capital argentina y aledaños, con un consumo por persona de 9,5 kilogramos al año, tiene un peso comparable al de muchos mercados tradicionales consumidores de pescado.
La investigación, que también se realizó en Montevideo, tuvo como objetivo marcar una metodología de trabajo que, luego del impulso inicial de la FAO, Infopesca se propone continuar en el resto de América Latina.
Uruguay, con 3,2 millones de habitantes, comercializa a través del mercado mayorista casi 7.000 toneladas anuales de pescado y otras 700 toneladas capturadas por pescadores artesanales. (FIN//IPS/rr/dm/dv if/99)
