La Organización de las Naciones Unidas (ONU) se autocongratuló en un estudio sobre comercio global y señaló que éste sería un desorden si no fuese por las normas del foro mundial.
"Cuando los barcos navegan libremente a través de los mares y de estrechos internacionales, están protegidos por normas legitimadas en conferencias de la ONU", destaca el informe de 78 páginas, titulado "Las Naciones Unidas y el comercio mundial".
Igualmente importantes son las reglas sobre calidad farmacéutica de la Organización Mundial de la Salud y los protocolos de la Unión Postal Universal sobre el correo internacional, subraya el estudio.
Sin estas normas, el mundo sería "una selva" para cualquiera que quisiera aventurarse más allá de sus fronteras nacionales.
Existe una idea "muy equivocada" de que el sistema de la ONU no es algo fundamental en el funcionamiento de la economía global, señala el estudio, redactado por el profesor Mark Zacher, del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Columbia Británica, Canadá.
"La importancia de los organismos de la ONU en la formulación de normas comerciales radica en que, para la legitimidad y eficacia de éstas, es necesario el apoyo de todos o casi todos los estados", destacó Zacher.
Si el sistema de la ONU no existiera, sería necesario crear otras organizaciones mundiales que cumplieran las mismas funciones regulatorias en la economía global, según el estudio.
Actualmente, la ONU tiene 14 fondos y programas y 12 agencias especializadas dedicadas al desarrollo económico y social.
Entre ellas se cuentan la Organización Meteorológica Mundial, la Organización de la Aviación Civil Internacional, la Unión Internacional de Telecomunicaciones, la Organización Mundial sobre Propiedad Intelectual y la Organización Marítima Internacional.
Estas agencias se encargan, entre otras cosas, del derecho de las aerolíneas comerciales a volar a través de las fronteras, el transporte de mercaderías por mar, la asignación de frecuencias de ondas aéreas y la recolección y distribución de datos climáticos sobre los 185 países miembros.
Si la ONU no fijara las normas, todas estas actividades serían un caos, señala el estudio.
"El costo de la universalización de estos servicios es minúsculo comparado con lo que los usuarios particulares tendrían que pagar si tuvieran que hacer tales arreglos ad hoc", continúa el documento.
"En relación con los ingresos y la mejora del nivel de vida generados por el comercio y la inversión transfronterizos, los costos son aún más marginales", agrega.
El estudio, publicado por el Departamento de Información Pública de la ONU, también destaca la necesidad de que las empresas internacionales apoyen a las diversos organismos del sistema que facilitan sus actividades.
Así mismo, dichas empresas deben defender a las instituciones multilaterales de los ataques que reducen su capacidad de contribuir al orden mundial, exhorta el informe. (FIN/IPS/tra-en/td/mk/mlm/ip-if/99