ROMA – Empresas de Italia contratan a trabajadores procedentes del Sur en desarrollo y de Europa oriental para tareas despreciadas incluso por italianos desempleados, señaló una organización empresarial.
Este fenómeno se comprueba, en particular, en el norte, la zona más industrializada del país, donde algunas empresas que requieren mano de obra colocan sus avisos en instituciones de inmigrantes y en cuatro idiomas: inglés, francés, árabe y español.
Una investigación de Unioncamare, institución que nuclea a los comerciantes italianos, y del Ministerio de Trabajo y la Unión Europea, reveló que numerosas empresas se proponen contratar a trabajadores extracomunitarios, como se denomina a quienes proceden de países ajenos al bloque europeo.
No se trata solo de obreros, sino también de empleados de servicio y comercio, pues las empresas no encuentran italianos dispuestos a realizar esas tareas.
Los extracomunitarios cubrirán un tercio de las contrataciones previstas para 1999 y 2000 en el noreste, 22 por ciento en el centro y 21 por ciento en el sur, la región menos industrializada de Italia.
"No se encuentran italianos para los trabajos difíciles, de escasa consideración social y bajo sueldo", explicó Roberto Fasoli, directivo de la cámara empresarial de la ciudad de Verona.
La desocupación en Italia asciende a 12,2 por ciento de la fuerza de trabajo, pero en el sur llega a 22,2 por ciento y entre los jóvenes hasta los 24 años asciende a 56,3 por ciento. —-
