El presidente Fernando Henrique Cardoso invistió hoy a los nuevos ministros de Brasil y les encargó duplicar las exportaciones y elevar la producción agrícola a 100 millones de toneladas de granos para el 2002.
Exportar 100.000 millones de dólares en el último año de su gestión será el gran desafío y la "prueba" de eficacia del gobierno, en especial del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio (MDIC), señaló el presidente.
El nuevo titular de esa cartera, Clovis Carvalho, consideró que el plazo era "apretado" pero suficiente para alcanzar la meta, si se logra desactivar algunas trabas en el proceso productivo y de exportaciones.
Eso dependerá de la integración entre los distintos ministerios involucrados en el esfuerzo exportador, como los de Agricultura y de Relaciones Exteriores, observó Carvalho.
El nombramiento de Marcus Pratini de Moraes al frente del Ministerio de Agricultura realzó la orientación exportadora que el presidente quiere imprimir a los tres años y medio que le quedan de gobierno.
Pratini ya fue ministro de Industria y Comercio en los años 70 y siempre se destacó como líder del sector exportador, pues presidió, incluso, la Asociación de Comercio Exterior. Admitió no ser un experto en agricultura, como sería de esperar del ocupante de su nuevo cargo.
Pero señaló que la expansión del sector no depende solo de estimular la producción, sino también de ofrecer mejores condiciones de crédito, comercialización, transporte, tecnología y acceso a mercados.
Abrir los mercados agrícolas de Europa, Estados Unidos y Japón, eliminando barreras y subsidios, es uno de los objetivos centrales de la diplomacia brasileña, en las negociaciones interamericanas, junto a la Unión Europea y en el ámbito de la Organización Mundial de Comercio.
Pero un mejor acceso de productos primarios a los ricos mercados del Norte industrial no será posible durante los años del gobierno de Cardoso.
La meta de 100 millones de toneladas anuales en el 2002 es "factible", pese a todo, sostuvo Pratini. Para este año se prevé que Brasil coseche más de 81 millones de toneladas del grano, un cantidad sin precedentes. En tres años habrá que aumentarla 23 por ciento.
Con el reordenamiento ministerial, se transfiere a la cartera de Agricultura la administración del azúcar, del alchol y del café, importantes productos de exportación, hasta ahora bajo orientación del MDIC.
Brasil es también gran exportador de soja, tabaco, jugo de naranja, cuero y carnes de vacuno y de pollo, todos productos cuya importación enfrenta algún tipo de restricción en los mercados más ricos.
Carvalho atribuyó a la necesidad de mayor coordinación interministerial, en el esfuerzo exportador, su transferencia al MDIC, ya que hasta ahora condujo la Casa Civil de la Presidencia, un órgano de articulación administrativa.
Hombre de confianza personal de Cardoso, el ministro era el encargado de ordenar la gestión presidencial. Como tal, le tocaba decir "no" a los reclamos de ministros y de líderes partidarios, que representaran gastos o inconveniencias políticas.
Por eso, generó muchos roces y su sustitución en el cargo era pedido por distintas fuerzas políticas. Su traslado solucionó el problema y fortaleció el MDIC, cuya conducción a cargo del empresario y diplomático Celso Lafer era considerada insatisfactoria por los aliados de Cardoso.
Ese ministerio también ganó fuerza por contar ahora con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social, institución de fomento que en los últimos años pudo conceder créditos por casi 20.000 millones de dólares al año y pasó a financiar las exportaciones.
En la jefatura de la Casa Civil, el presidente puso a Pedro Parente, hasta ayer el segundo del Ministerio de Hacienda, y por tanto un dirigente comprometido con la estabilidad monetaria y la austeridad fiscal. La relación con los políticos seguirá, así, supeditada a las exigencias económicas.
Para relacionarse con el sector político, Cardoso restableció el cargo de secretario general de la Presidencia, destinada al diputado Aloyisio Nunes Ferreira.
Cardoso también prometió prioridad al área social en su discurso, al dar posesión a nueve ministros y secretarios de Estado. Destacó que la enseñanza primaria ya alcanza a 96 por ciento de los niños en la edad propia y que pretende concluir su gobierno con 100 por ciento. (FIN/IPS/mo/mj/ip if/99
