TURQUIA: Juicio a líder kurdo comienza el lunes

Este lunes comienza el juicio en Turquía contra el dirigente kurdo Abdulá Ocalan, que podría convertirse en un foro para el diálogo y la reconciliación étnica o en el altar en que el guerrillero será "sacrificado" para aplacar la sed de venganza de los nacionalistas.

Aunque el gobierno de coalición considera la posibilidad de aplazar el juicio, la mayoría de los analistas independientes concuerdan en que el resultado afectará profundamente la "cuestión kurda" y las relaciones con la Unión Europea (UE), a la que Ankara desea incorporarse desde hace años.

Un Tribunal de Seguridad Estatal juzgará a Ocalan, líder del Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK), por alta traición y por dirigir una guerra de guerrillas para la autodeterminación de los 12 millones de kurdos de este país.

Aproximadamente 35.000 personas perdieron la vida, dos millones fueron desplazadas y 6.000 aldeas y pueblos fueron evacuados o destruidos desde que la guerra comenzó hace 15 años, informaron grupos de derechos humanos.

Ocalan, a quien los fiscales consideran el único responsable por esa tragedia humana, podría ser condenado a muerte.

"Me preocupa que la ejecución de Ocalan, si los jueces así lo deciden, agrave la lucha interna, aunque también podría saciar la sed de 'justicia' de los parientes de los soldados turcos que murieron en la lucha contra los rebeldes kurdos", dijo Nilufer Narli, profesor de la Universidad de Mármara en Estambul.

Ocalan, desde su encierro, planea convertir el proceso en un foro en el que la cuestión kurda se discuta abiertamente por primera vez en la historia de Turquía, según cartas del líder filtradas a la prensa.

"Lucharé para transformar el conflicto en una solución democrática y lograr la paz. Sin embargo, el futuro es incierto. Si todo se aclara y me dan la oportunidad, estoy seguro de que todos ganaremos. Esa será mi estrategia de defensa, este juicio podría ser un punto decisivo", escribió Ocalan en una carta a Teslim Tore, otro renombrado prisionero político.

Los abogados de Ocalan son menos optimistas respecto de sus posibilidades de derrotar al sistema, para el que parece haber un solo veredicto posible, culpable, y una sola condena posible, muerte por colgamiento.

"Este proceso ilegal y arbitrario concluirá inevitablemente con la ejecución de Ocalan. Ningún dirigente kurdo desde la fundación de la República (turca) hasta la fecha ha sobrevivido a un juicio. Todos fueron colgados. Esa es la tradición y Ocalan no será la excepción", explicó a IPS el abogado defensor Ahmet Zeki Okcuoglu.

"Desde que tomamos la defensa de Ocalan, hemos sido objeto de ataques, se nos negaron nuestros legítimos derechos, fuimos golpeados e intimidados. Nuestras protestas nunca fueron oídas por el gobierno. No quiero tomar parte de este juego", agregó.

Okcuoglu culpa al Poder Judicial por el ambiente hostil que rodea al caso y, en protesta, anunció que no estará presente en el tribunal durante el juicio.

Pero informes de la oficina del primer ministro Bulent Ecevit indican que el nuevo gobierno de coalición formado este viernes analiza aplazar el juicio, en virtud de la falta de garantías judiciales y administrativas que podrían perjudicar aun más la imagen de Turquía en materia de derechos humanos.

Los tribunales de seguridad del Estado son uno de los puntos más polémicos del caso. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos señaló que la estructura de estas cortes, integradas por dos jueces civiles y uno militar, viola los tratados internacionales firmados y ratificados por Turquía.

Occidente, inmerso en una devastadora guerra aérea contra Yugoslavia para proteger a 1,8 millones de albanokosovares, no se puede dar el lujo de ignorar el destino de 12 millones de kurdos en Turquía, que también es miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, señalaron observadores del caso.

Pero a los fiscales no les parece importar la opinión europea.

"La decisión del Tribunal Europeo no obliga al Estado turco. No tiene fuerza de ley. Incluso si lo tuviera, las modificaciones se deberían haber adoptado antes. Si se hacen ahora, podría entenderse como un intento de salvar a Ocalan", declaró uno de los tres fiscales, Talat Salk.

"Nadie excepto dios puede interferir en el caso", dijo el juez que presidirá el juicio, Mehmet Turgut Okyay.

La controversia rodeó al caso de Ocalan desde febrero, cuando el dirigente fue detenido por la policía en Nairobi, donde era huésped del embajador griego, y luego entregado a agentes turcos, en una operación apoyada por Estados Unidos y, presuntamente, por Israel.

Ocalan había sido expulsado en septiembre de Siria, por presión de Turquía, y luego solicitó asilo sin obtenerlo en Rusia, Italia, Grecia, Chipre y Holanda.

El juicio, que se estima concluirá en dos meses, se desarrollará bajo estrictas medidas de seguridad y restricciones a la información en el tribunal de la isla de Imrali, donde Ocalan se encuentra detenido.

La primera fila del público se destinó a un grupo de familiares de soldados muertos en la guerra contra los guerrilleros kurdos, y también estarán presentes 12 familiares de Ocalan.

El gobierno prohibió la presencia de observadores extranjeros y sólo acreditó a 16 miembros del Parlamento Europeo en el juicio.

La televisión estatal, la agencia de noticias Anatolia y la red de televisión de cable estadounidense CNN serán los únicos que podrán filmar y tomar fotografías, junto a un número limitado de periodistas nacionales y extranjeros que podrán cubrir directamente el proceso.

El abogado de Ocalan dijo que el recluso, a quien ve dos veces por semana, está bajo constante presión de los guardias que le "aconsejan" que se comporte en el tribunal para eludir la pena de muerte.

También advirtió que la "ejecución de Ocalan será una invitación para renovar la guerra" que asegura es fomentada por poderosos intereses que componen un "nuevo sector económico" en Turquía.

La inquietud de Okcuoglu es compartida por una declaración de Osman Ocalan, hermano de Abdula y también dirigente del PKK, que advierte que habrá más derramamiento de sangre si el líder es ejecutado.

"Si Turquía quiere impedir una guerra aun más destructiva, debe responder a la propuesta que hicieron nuestros dirigentes por una reconciliación democrática", declaró Osman Ocalan a un diario del PKK editado en Alemania.

"La detención de Ocalan no socavó nuestra fuerza. Si no se llega a una solución se lanzará una guerra muy destructiva. Al menos 5.000 combatientes fueron reclutados para realizar ataques suicidas", advirtió. (FIN/IPS/tra-en/nm/ak/aq/ip-hd/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe