La pasión, las angustias, el amor, la muerte, la devoción y la aventura de vivir de 17 mujeres latinoamericanas notorias fueron plasmados por la periodista uruguaya Mónica Bottero en un libro publicado en esta capital y que tituló "Diosas y Brujas".
La obra publicada por la editorial Fin de Siglo reúne el trabajo de seis años, en los cuales Bottero recorrió América para entrevistar a personalidades tan disímiles como la nicaragüense Violeta Chamorro, la mexicana Gloria Ornelas, la venezolana Irene Sáez, la cubana Ana Fidelia Quirot o la guatemalteca Rigoberta Menchú.
El periplo también la llevó a encontrarse con la venezolana Carolina Herrera, la chilena Isabel Allende, la colombiana María Jimena Duzán, la cubana Gloria Estefan, las brasileñas Stella de Oxossi y Dona Zica, las argentinas Hebe de Bonafini, Libertad Lamarque y Norma Aleandro, la portorriqueña Nydia Velázquez y la peruana Donatila Gamarra.
Las entrevistas se completan con Mafalda, un personaje de historieta creado por el argentino Quino (Joaquín Lavado).
Quino "impuso en Mafalda su impronta de una imagen femenina que bien pudo ser el origen de muchas mujeres de fines del siglo XX: independiente, con ideas propias y atenta tanto al mundo familiar como al de fuera", según la autora.
El estilo utilizado por Bottero no es uniforme. Plasmó cada entrevista apoyándose en diversas modalidades que van desde la novela hasta el guión cinematográfico, pero en todas y cada una de ellas emerge nítida la periodista de 35 años.
"La idea inicial era describir un conjunto que representara, en clave de género, una especie de espejo de las mujeres latinoamericanas", dijo.
El subtítulo del libro para reflejar esa intención: "17 mujeres que se construyeron a sí mismas".
"Para construir ese espejo de la manera más genuina posible creí que había que alejarse de prejuicios o complejos de inferioridad culturales y aceptar que Miss Universo (Irene Saéz) es tan parte de nuestra cultura, como una Madre de Plaza de Mayo (Hebe de Bonafini), una líder comunitaria (Donatila Gamarra) o una heroína de melodramas (Libertad Lamarque)", explicó.
A medida que se avanza en la lectura de cada una de las entrevistas, se siente la necesidad de pasar a la siguiente.
Conocer por ejemplo las razones que tiene la cubana Ana Fidelia Quirot, la atleta más laureada de América Latina, para sentir devoción por el régimen de su país, que tiene en la cantante Gloria Estefan a su contracara para combatirlo.
"Yo sé, tengo claro que el día que me hagan una oferta para irme es porque quieren lograr que el imperialismo se anote un punto más (…) Pero a mí no me compran ni con todo el dinero del mundo", razona Quirot en la entrevista.
"Sé que hay (en Cuba) personas a las que han detenido por esuchar 'Oye mi canto'. Y es que lo hice para ellos", dice por su lado Estefan.
El libro también puede agitar en el lector la necesidad de sustituir a Bottero para compartir un día entero con Isabel Allende y tener la oportunidad de dialogar mano a mano con la escritora contemporánea latinoamericana de mayor difusión universal.
En cada una de las entrevistas surgen noticias, mayores o menores, que la periodista hizo emerger en sus preguntas.
Irene Sáez contó que a fines de los año 80 decidió escribir un libro testimonial, basado en un diario personal, con el objetivo de no dejar pasar por algo lo que consideraba una explotación de su persona como producto comercial.
El prólogo de ese libro lo escribió su compatriota Arturo Uslar Petri, pero luego de ser incluso anunciado, el lanzamiento debió suspenderse.
Una persona llamó a Saéz para contarle una anécdota: una joven que había amenazado a la organización empresarial Mis Universo con demandarla llegó un día a un aeropuerto, le hicieron abrir la maleta y ante testigos le encontraron drogas.
"El mensaje era muy claro. No me animé a publicar el libro y esto te lo cuento a ti por primera vez, con la esperanza de que al fin se sepa", confió Irene a la entrevistadora.
La periodista y escritora española Rosa Montero, que prologó el libro, destacó el rigor de la investigación realizada por Bottero y la "meticulosidad de periodista a sus espaldas", a la hora de redactar los textos.
Montero dijo que "lo que más me interesa de este libro es la pasión que palpita detrás de cada entrevista: ese afán de meterse dentro de la piel de las entrevistadas, esa sincera necesidad que muestra Bottero de aprender algo nuevo, pero algo sustancial, algo en verdad revelador de lo que somos".
"Conocer los límites del ser nos hace más sabios", sentenció Montero. (FIN/IPS/rr/dm/cr/99)