La publicación en Panamá de una encuesta que muestra a Martín Torrijos, candidato a la presidencia del partido gobernante, con 13 puntos porcentuales de ventaja sobre la opositora Mireya Moscoso, desató una dura polémica.
La encuesta, de la compañía Ditcher y Neira, fue realizada por encargo del influyente diario La Prensa, e indicó que Torrijos, del gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD), era preferido por 45,1 por ciento de los consultados que aseguraron que votarían en las elecciones generales del 2 de mayo.
En segundo lugar apareció Moscoso, del opositor Partido Arnulfista, con la preferencia de 32 por ciento de los entrevistados, y en tercer lugar Alberto Vallarino, de una coalición opositora encabezada por el Partido Demócrata Cristiano, con 17,2 por ciento.
Martín Torrijos es hijo del extinto presidente Omar Torrijos, quien gobernó el país desde 1969 hasta su muerte en un accidente aéreo en 1981.
Desde el 10 de octubre de 1998, cuando Martín Torrijos fue escogido en una elección interna del PRD como candidato a la presidencia, todas las encuestas publicadas indicaron que es quien cuenta con mayores probabilidades de triunfar en los comicios.
Sin embargo, el notable incremento logrado por el candidato del PRD entre febrero y marzo, cuando pasó de 38 a 45,1 de preferencias entre los consultados, hizo que Moscoso y Vallarino pusieran en duda la veracidad de los sondeos de opinión pública.
"Esas encuestas son manipuladas", afirmó Moscoso, exhortando a los panameños a "no dejarse engañar más" por ellas.
La candidata recordó que las encuestas realizadas por Ditcher y Neira antes de las elecciones del 7 de mayo de 1994 indicaron que ella tenía el apoyo de sólo 17 por ciento de los entrevistados pocos días antes de los comicios, en los cuales obtuvo el segundo lugar con 29 por ciento de los votos.
Moscoso recordó que luego de aquellas elecciones los directivos de Ditcher y Neira, así como los de CID/Gallup, otra firma que realiza encuestas, le enviaron una carta pidiéndole disculpas por el error.
"Lo que me interesa actualmente es que Leopoldo Neira (uno de los propietarios de Ditcher y Neira) admita que se equivocó en 1994", declaró Moscoso.
Sin embargo, Neira reivindicó que en aquella ocasión su compañía pronosticó que el actual presidente Ernesto Pérez Balladares "ganaría la elección, y acertó".
Neira tambien recordó que la firma anticipó el resultado del referendo del 30 de agosto, en el cual 64 por ciento de los votantes rechazaron un proyecto de reforma constitucional que habría permitido la reelección de Pérez Balladares, y predijo que Martín Torrijos ganaría las elecciones internas del PRD.
"Esos son nuestros antecedentes, pero lo que sucede es que cuando un candidato no aparece en la mejor ubicación, obviamente ataca la encuesta", opinó Neira.
Adwin Cabrera, uno de los promotores de la campaña de Vallarino, admitió que es posible que Torrijos ocupe el primer lugar de las preferencias del público, pero no aceptó que tenga una ventaja de casi 28 puntos porcentuales sobre su candidato, "porque él (Torrijos) no ha hecho nada para merecer ese lugar".
Cabrera dijo que según encuestas encargadas por el grupo que apoya a Vallarino, Torrijos puede ser apoyado por aproximadamente 37 por ciento de los votantes, lo cual estaría apenas por encima de los porcentajes alcanzados por el PRD en anteriores elecciones generales.
El coordinador de la campaña publicitaria de Torrijos, Alejandro Fernández, afirmó que la sorpresiva magnitud de la ventaja de su candidato en las encuestas se debe a que "la gente está cansada de los partidos y los políticos tradicionales, y está optando por una figura joven y nueva en la política".
"Mientras Moscoso y Vallarino mantienen un discurso de políticos tradicionales, Martín (Torrijos) presenta una propuesta nueva y sin planteamientos demagógicos", añadió. (FIN/IPS/sh/mp/ip/99)
