AMBIENTE: Falla del 2000 provoca temor por seguridad nuclear

El lanzamiento inadvertido de armas nucleares y la posible fusión de centrales atómicas podría ser una de las consecuencias del enloquecimiento de las computadoras cuando ingresen al año 2000, advirtieron legisladores y organismos especializados de Estados Unidos.

El problema surge por la llamada falla del 2000. Después de la medianoche del 31 de diciembre, muchas computadoras y máquinas controladas electrónicamente interpretarán al 00 como al año 1900 en lugar del 2000, o no lo interpretarán para nada y funcionarán mal, bloqueándose o leyendo erróneamente los datos.

Es absolutamente posible que ocurran catástrofes nucleares si no se resuelve la falla, afirmaron analistas en temas de paz y seguridad que participaron el lunes en Washington de un congreso.

El lanzamiento accidental de un misil es considerado muy improbable, pero ese disparo podría ocurrir algunos minutos después de que la computadora falle en ordenar la "alarma anticipada" o el "alerta" de los sistemas de lanzamiento, en los que se basan muchas armas nucleares.

"La falla de cualquier elemento en el sistema de alarma anticipada podría llevar a Estados Unidos o Rusia a creer que estan siendo atacados", dijo Michael Kraig, del Consejo de Información de Seguridad Británico Estadounidense (BASIC), un grupo de estudios con oficinas en Washington y Londres.

Los militares estadounidenses y rusos analizan compartir información sobre la alarma anticipada para impedir lanzamientos accidentales por datos erróneos, causados por la falla del 2000.

China, Gran Bretaña, India, Pakistán y otras potencias nucleares también comenzaron a resolver el problema, dijeron analistas en seguridad.

De todas maneras, el problema persiste y es muy complicado en el aspecto técnico y diplomático, según los panelistas de la conferencia.

Los militares estadounidenses, por ejemplo, tienen más de 1,5 millones de computadoras y 28.000 sistemas automatizados repletos de microconductores, así como 70 lenguajes de computación diferentes.

"Uno de cada cinco días me despierto bañado en sudor pensando (que la falla del 2000) es más grande de lo que creemos, y los demás días creo que quizá lo podremos superar", reconoció el año pasado el subsecretario de Defensa, John Hamre.

"Todo está tan interconectado que es muy difícil determinar qué es lo que realmente tenemos bajo control", agregó.

Bruce Blair, un analista de seguridad y armas del Instituto Brookings, dijo en el simposio que el sistema ruso de alarma anticipada es especialmente vulnerable a la falla porque el gobierno no tiene los recursos para combatirlo.

"Si la fecha se pasa a cero por un brevísimo instante… eso engaña al sistema y lo induce a pensar que hay una fuerte probabilidad de un ataque nuclear en marcha", declaró Sergei Fradkov, un ex técnico de control de satélites, según un informe escrito por Kraig.

El mes pasado, Rusia apeló a Estados Unidos y a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para que la ayuden a solucionar la falla, cuyo costo Moscú calcula en 3.000 millones de dólares, que incluye no sólo sistemas de armas nucleares sino también centrales atómicas.

A comienzos de mes, Vladimir Dvorkin, jefe del departamento del ministerio de Defensa a cargo de los sistemas de alarma anticipada, declaró que Rusia sería mucho menos proclive a una acción de represalia en caso de peligro si no existiera la tensión actual con Estados Unidos y la OTAN debido a los bombardeos a Iraq y la amenaza de ataques contra Yugoslavia.

"El riesgo de adoptar decisiones erróneas es mucho más alto cuando aumenta la tensión internacional", declaró Dvorkin a la agencia rusa de noticias Interfax.

En el simposio del lunes, Kraig y los legisladores Ed Markey y Tom Harkin pidieron que se le quitara el estado de alerta o "alarma de lanzamiento" a todas las armas nucleares rusas y estadounidenses.

"La guerra fría terminó. Las armas nucleares en Estados Unidos y Rusia no deberían encontrarse en estado de alerta", dijo Markey, representante del estado de Massachusetts.

Las centrales de energía nuclear son también vulnerables a sufrir un descalabro en su sistema de computación al comenzar el 2000, según el panel.

"Está claro que no todas las instalaciones nucleares serán inmunizadas contra la falla a tiempo para el 2000", declaró Michael Mariotte, director ejecutivo del Centro de Información y Recursos Nucleares.

"En adelante no se pueden descartar posibles inestabilidades en las redes eléctricas, ni apagones locales o regionales", dijo.

Las fallas de energía podrían causar fusiones en núcleos de reactores nucleares, en las centrales, o escapes accidentales de radiación dado que los reactores requieren grandes volúmenes de electricidad para su enfriamiento, aunque estén cerrados.

Microconductores de computadoras, encastrados en aparatos usados para controlar o asistir al funcionamiento de centrales de energía nuclear, también podrían ser catastróficos si la Agencia Nuclear Reguladora (NRC) estadounidense no hace algo más para solucionar el problema, apuntó el ingeniero David Lochbaum.

Lochbaum es un ingeniero de seguridad nuclear de la Unión de Cientificos Preocupados, un grupo de vigilancia con sede en Washington.

La NRC gastó decenas de millones de dolares en la falla del 2000, anadió. No obstante, la agencia sólo hizo pruebas en una docena de plantas nucleares en todo Estados Unidos para comprobar cómo reaccionan al problema. Harkin y Markey pidieron a la agencia que controle todas las centrales.

También pidieron a la NRC que se asegure si existen fuentes de energía suplementarias para que las plantas nucleares no corran el riesgo de recalentamiento.

La NRC exige actualmente que cada reactor tenga disponibles al menos dos generadores diesel para suministrar energía provisoria en caso de emergencia.

Sin embargo, según Helen Caldicott, fundadora de Médicos por la Responsabilidad Social, una organización que ganó el premio Nobel, esos generadores son confiables sólo entre 75 y 95 por ciento y a menudo están fuera de servicio.

"Si un médico dice que tu corazón es confiable en un 95 por ciento, no creo que te sientas cómodo", dijo Caldicott. "Debemos considerar de la misma manera a los generadores diesel", añadió. (FIN/IPS/tra-en/dk/kb/ego/aq/en/99)

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