El sector energético, uno de los más codiciados por las empresas extranjeras en Cuba, acogió esta semana la primera inversión con capital totalmente extranjero que se ejecuta en la isla.
La compañía panameña Genpower Cuba SA realizó esta inversión al aportar el financiamiento para la construcción de una central eléctrica diesel con tecnología de punta en la Isla de la Juventud, a 110 kilómetros de La Habana.
Mike Nahmad, presidente de la firma panameña, declaró al semanario Opciones que la central tendrá una vida útil de 25 a 30 años y que el suministro, montaje y puesta en marcha del equipamiento recaerá en las empresas Man B and W (Alemania) y Telemania (Israel).
De acuerdo con la publicación, ya comenzó la construcción de la central, que deberá comenzar a operar a fines de 1999 y satisfacer casi totalmente la demanda de este territorio con cerca de 100.000 habitantes.
En los últimos ocho años, el gobierno cubano ha incentivado aun más la apertura a la inversión extranjera como uno de los pilares de su estrategia para revertir la abrupta caída que sufrió la economía nacional a partir de 1990.
Actualmente existen en la isla unas 351 asociaciones con capital extranjero, en especial de España, Canadá, Italia, Francia e Inglaterra, de acuerdo con fuentes del Ministerio para la Inversión Extranjera y la Colaboración Económica (MINVEC).
Estas naciones, al decir del ministro de Inversión Extranjera, Ibrahim Ferradaz, concentran 80 por ciento de todos los negocios, fundamentalmente en la industria básica y el turismo.
Ferradaz aseguró que dos de cada cinco empresas "fueron constituidas tras la aprobación de la ley Helms-Burton" estadounidense, norma que sanciona a empresarios de terceros países que trafiquen con bienes estadounidenses expropiados en la isla.
"Habría mayor flujo de inversión si no existieran las presiones comerciales y financieras de Estados Unidos contra los que deseen invertir en Cuba", declaró el año pasado José Luis Rodríguez, ministro de Economía y Planificación.
A su juicio, "Cuba es un país atractivo para la inversión extranjera por la capacidad para absorber capital foráneo con las reglas que hemos planteado, sin una apertura desordenada, en aquellos sectores donde nos interesa".
De acuerdo con Rodríguez, la inversión extranjera constituye un complemento de los esfuerzos propios de la isla. "Ochenta por ciento de la inversión básica de nuestro país se ha hecho con capital cubano", dijo.
Aunque en 1988 se creó la primera asociación económica internacional con la cadena hotelera española Sol Meliá, no es hasta hoy que surge la primera inversión con capital totalmente extranjero, esta vez panameño.
La construcción de la moderna planta de generación de electricidad por parte de la empresa panameña Genpower Cuba SA, se hará en la Isla de La Juventud por el alto grado de deterioro de sus plantas, informó el semanario Opciones.
De acuerdo con la publicación, estas centrales ya no garantizan debidamente el servicio eléctrico a los cerca de 100.000 habitantes ni a las instalaciones industriales y turísticas del territorio.
Próxima a la costa sur de La Habana, la Isla posee varios cayos y puntas con potencialidades turísticas, como Cayo Largo, actualmente en explotación, que podrían favorecerse con la nueva central eléctrica.
Directivos de Genpower aseguran que la inversión total, estimada en unos 15 millones de dólares, debe recuperarse en unos cuatro años y medio por la venta de la energía generada a la Unión Eléctrica cubana.
Tras ese período, afirman, esta Unión recibirá la propiedad de la planta y Genpower, parte de las ganancias.
No obstante, el gerente de Genpower, Mike Nahmad, aseguró que piensan reinvertir los beneficios en el país y mencionó la posibilidad de un gran proyecto en el sector energético con un costo cercano a los 150 millones de dolares. (FIN/IPS/pg/mj/if en/99