/BOLETIN-INTEGRACION/

La declaración de hostilidades comerciales por el banano entre las dos grandes potencias, Estados Unidos y la Unión Europea (UE), quedó esta semana supeditada a una interpretación legal en la Organización Mundial del Comercio (OMC).

El ordenamiento jurídico de la OMC para la solución de diferencias entre sus miembros desnudó lagunas e interpretaciones contradictorias en el caso del banano, que pueden agravar el conflicto, vaticinó un delegado negociador.

Estados Unidos ya tiene preparada una andanada de sanciones comerciales que amenaza aplicar en represalia por el supuesto incumplimiento europeo de las reglas del libre comercio en la importación de banano.

La OMC encomendó el martes a un grupo especial (panel) que dictamine si la última reforma del régimen de comercialización europeo se adapta a las normas del sistema multilateral.

El trámite jurídico abierto por esa decisión de la OMC aplica el artículo 21, párrafo sexto, de las normas de solución de diferencias, que regula controversias sobre aplicación de fallos dictados por tribunales de la misma institución.

La constitución del grupo especial, solicitado en forma separada por Ecuador y la UE, contempla la posibilidad de que el pleito por el banano se prolongue por lo menos unos tres meses más hasta que el panel emita su dictamen.

Algunos negociadores sostuvieron que la aplicación de esa norma interrumpe las acciones de represalia emprendidas por Estados Unidos, en el marco de la OMC, para aumentar los aranceles aduaneros a una serie de productos europeos.

La suspensión de las concesiones arancelarias por parte de Estados Unidos, previstas en el artículo 22 del régimen de solución de diferencias, pueden representar pérdidas a la UE por unos 600 millones de dólares.

Los dos artículos del entendimiento de solución de diferencias son "secuenciales" y en consecuencia corresponde esperar el fallo del primero para proceder con la aplicación del segundo, dijo a IPS la fuente, que pidió el anonimato.

En ese caso, la amenza de sanciones inminentes contra la UE se desvanecería por lo menos durante los 90 días otorgados al grupo especial para que dicte su sentencia.

Pero otra interpretación dedujo que los dos artículos son independientes y que ya están corriendo los plazos que el artículo 22 otorga a Estados Unidos para que solicite la autorización de ejercer las represalias.

La delegación de Estados Unidos ante la OMC debía presentar esa solicitud esta semana, 10 días antes de la próxima reunión del Organo de Solución de Diferencias, convocada para el 26 de febrero.

En este aspecto, el mecanismo de solución de diferencias de la OMC "se queda corto y desnuda sus lagunas" porque omite precisiones sobre el caracter "secuencial o independiente" de los dos artículos en juego, estimó la fuente.

La situación creada "es delicada" y los delegados de los 132 países miembros de la OMC "tienen conciencia", describió el negociador. El clima de fragilidad obedece a que "los dos más grandes socios del planeta se están peleando y eso no es bueno".

Sólo una vez en medio siglo de historia del sistema multilateral de comercio se había recurrido al extremo de las represalias. El episodio ocurrió en los años 50, en los comienzos del Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), el antecesor de la OMC

Los protagonistas fueron los mismos, estadounidenses y europeos, en un conflicto de productos lácteos suscitado por exportaciones de Holanda.

El litigio actual se origina en el régimen de importación establecido en Europa que viola las normas de la OMC para favorecer al banano producido en las ex colonias europeas de Africa, Caribe y Pacífico (ACP).

Estados Unidos, asociado con México, Guatemala, Honduras y Ecuador, obtuvo fallos favorables en todas las instancias de la OMC, que condenaron a la UE a reformar sus modalidades de comercialización.

Pero mientras los países latinoamericanos demandantes se limitan a litigar en los estrados de la OMC, Estados Unidos decidió ejercer derechos que le concede el sistema multilateral y aplicar las sanciones contempladas en el artículo 31 de su Ley de Comercio.

Por su parte, la UE alegó que su nuevo régimen debe reputarse adaptado a las normas de la OMC mientras su conformidad no haya sido cuestionada dentro de los procedimientos de la institución. (FIN/IPS/pc/ag/if/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe