La pobreza extrema aumentó cada año en México en casi un millón de personas durante la última década, pese al desarrollo industrial y exportador del país, indicó un informe parlamentario.
En los últimos 10 años, los mexicanos en pobreza extrema pasaron de 17 millones a más de 26 millones, en una población total de 90 millones, según cifras de la Comisión de Desarrollo Social de la Cámara de Diputados publicadas el lunes pasado por el diario Reforma.
La población del país aumentó en 2,2 millones de habitantes de 1997 a 1998, en tanto la población en pobreza extrema creció en unos cuatro millones de personas.
Sin embargo, el secretario de Desarrollo Social, Esteban Moctezuma, aseguró que si bien la pobreza sigue aumentando en términos númericos, en términos porcentuales disminuye.
"Tenemos en la actualidad 21 millones de hogares de los cuales 4,51 están en extrema pobreza, lo que significa alrededor de un 22 por ciento de los hogares, que en términos absolutos son 26 millones de mexicanos en pobreza extrema", afirmó Moctezuma.
La parlamentaria Clara Brugada, del centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), replicó que "en términos abolutos y relativos está creciendo la pobreza. Cada vez es mayor el número de pobres que se hacen, que los pobres que nacen".
"El modelo económico actual es no sólo incapaz de sacar de la pobreza a los pobres históricos sino que arroja a ella con cada vez más rapidez a los sectores de pobreza moderada y clases medias", añadió.
Brugada se basa en cifras de la Comisión Económica para América Latina y del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Información, según las cuales en 1984 había 11 millones de personas en pobreza extrema, en 1995 la cifra subió a 15 millones y en 1996, a 17 millones.
Al año siguiente la población en pobreza extrema llegó a 22 millones de personas. Y este año, aunque la tasa anual de empobrecimiento dismiunuyó, hay 26 millones de personas en extrema pobreza.
Sólo en la capital mexicana un tercio de la población -2,7 millones de personas- viven en condiciones de extrema pobreza, lo que significa que tiene escaso o nulo acceso a servicios básicos como educación, vivienda, alimentación, salud y recreación, según estadísticas oficiales.
Ante esta situación, la Cámara de Diputados propone que para paliar en algo la pobreza extrema se distribuyan entre este sector de la población las 17.000 millones de toneladas de alimentos que se desperdician diariamente en el país.
Los parlamentarios propondrán como parte de las próximas celebraciones del Día Mundial de la Alimentación, el día 16, que se analicen dos propuestas para elevar a rango constitucional el derecho a la alimentación y para apoyar la donación de comida.
Otros organismos, como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), trabajan actualmente en México para enfrentar el grave problema de la pobreza extrema.
El PNUD invertirá este año al menos cinco millones de dólares para combatir la pobreza extrema, de un presupuesto de unos 80 millones de dólares que contempla la cooperación técnica del organismo internacional. (FIN/IPS/fv/ag/pr/98