México y la Unión Europea crearon un Consejo Conjunto que permitirá el inicio este año de negociaciones para un acuerdo de liberalización del comercio entre las partes.
El nuevo organismo representa "un paso histórico" para el inicio formal de conversaciones entre la Unión Europea y México, dijo el martes pasado en Bruselas el ministro de Comercio Exterior mexicano, Herminio Blanco.
"Para nosotros, este es un importante paso en el proceso de acercarnos a la Unión Europea", agregó Blanco.
Las negociaciones, cuyos resultados deben ser compatibles con las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), pretenden liberalizar el comercio de bienes y servicios así como el movimiento y el pago de capitales, abrir los mercados de compras del Estado y adoptar disciplinas de competencia y derechos de propiedad intelectual.
Las partes esperan que el acuerdo de libre comercio empiece a operar como máximo a partir del 2001.
La ministra de Relaciones Exteriores de México, Rosario Green, dijo que "con la creación del Consejo conjunto, damos un lanzamiento formal al próximo capítulo sobre el libre comercio incluído en el acuerdo entre México y la UE".
"Este es el reflejo del interés y la voluntad política de ambas partes para dar nuevo ímpetu al comercio, y asegurar que las relaciones actúen en interés de nuestras sociedades", dijo Green.
El comercio entre México y la UE disminuye desde hace una década, durante la cual las exportaciones del bloque al país latinoamericano se redujeron a la mitad. El volumen de comercio bilateral de 1997 alcanzó 13.904 millones de dólares, con un saldo deficitario de 5.929 millones de dólares para México.
El vicepresidente de la ejecutiva Comisión Europea, Manuel Marín, dijo que el acuerdo que se alcanzará "parecía imposible dos años atrás".
Marín indicó que la UE pretende "aumentar las relaciones comerciales recíprocas y el comercio en general, liberalizar el movimiento de bienes y capitales, y abrir los mercados de compras en gran escala del Estado".
El organismo conjunto hará que durante la segunda mitad de este año sea posible iniciar las negociaciones técnicas, agregó Marín.
La UE mantiene libre comercio o acuerdos preferenciales con unos 100 países, lo cual significa que las exportaciones mexicanas a la UE, principalmente petróleo y bienes industriales, deben pagar impuestos más altos que otros países.
México, miembro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), tiene interés político y económico en diversificar sus relaciones comerciales, ya que alrededor de 80 por ciento de su comercio exterior depende de un único país, Estados Unidos.
No es obligatorio para México consultar a los otros miembros del TLC (Canadá y Estados Unidos) para mantener negociaciones de comercio exterior con terceras partes.
Las conversaciones pretenden dar efecto a amplios objetivos fijados en el Acuerdo Interino México-UE sobre Comercio y Aspectos Relacionados al Comercio. La firma de los acuerdos el 8 de diciembre de 1997 marcó la culminación de más de dos años de trabajo preparatorio e intensas conversaciones.
El mismo día se firmó además un Acuerdo de Asociación Económica, Coordinación Política y Cooperación para el futuro desarrollo de relaciones entre ambas partes.
"Ambos acuerdos están basados en el respeto de derechos humanos fundamentales y principios democráticos, y contienen cláusulas especiales diseñadas para asegurar que estos valores sean respetados", dijo la Comisión Europea.
Aunque es difícil "predecir cuándo podrán finalizar estas negociaciones", Marín dijo tener la esperanza de que, a fines de septiembre o en la primera semana de octubre, "todos los mecanismos burocráticos que creamos habrán concluido". (FIN/IPS/tra-en/ns/lp/if ip/98