La Organización de las Naciones Unidas (ONU) carece del mandato y los recursos financieros para la lucha contra el comercio ilegal de drogas, que moviliza en el mundo unos 400.000 millones de dólares al año.
Pino Arlacchi, director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para la Fiscalización Internacional de las Drogas (PNUFID), dijo que es "inconcebible" que el organismo lleve a cabo una "guerra de la droga" con un presupuesto anual de unos 65 millones de dólares.
La declaración de Arlacchi respondió a denuncias de organizaciones no gubernamentales según las cuales el PNUFID promueve una guerra con consecuencias sociales, por ejemplo tácticas policiales represivas, crecientes tasas de desempleo y daño económico a los países en desarollo.
Considerado un luchador contra la mafia en Italia, su país de origen, Arlacchi también es director de la Oficina de Fiscalización de Drogas y Prevención de Delitos de la ONU.
El PNUFID convocó a una Sesión Especial sobre el Problema Mundial de la Droga, a llevarse a cabo entre el 8 y 10 de junio en la sede de la ONU, que contará con la presencia de los presidentes de Estados Unidos, Bill Clinton, y de Francia, Jacques Chirac.
La cumbre deberá producir una estrategia de control de la droga y un plan de acción aprobado por los 185 estados miembros de la ONU. La implementación del plan de acción estará a cargo de cada país.
Será la primera vez que habrá un acuerdo universal sobre una estrategia antidrogas, dijo Arlacchi, ahora que la disminución de las divisiones entre Este y Oeste y Norte industrializado y Sur en desarrollo facilita la cooperación en muchos temas.
"Ningún país es inmune a las drogas", por lo cual los países deben enfrentar el problema como una fuerza integrada, incluyendo planes de sustancial reducción de cosechas de narcóticos en la próxima década.
Arlacchi espera que la cumbre toque también el tema del lavado de dinero, el secreto bancario y la evasión de impuestos, grandes impedimentos para las investigaciones sobre el tráfico de drogas.
El director ejecutivo del PNUFID no está de acuerdo con algunas propuestas de ONG para la despenalización o la legislación de las drogas. "Ningún país ha tomado esa posición", sostuvo.
La cumbre hará un llamado al retiro de los impedimentos a la extradición de responsables de delitos graves.
Algunas áreas de cooperación judicial entre países miembros incluyen asistencia legal mutua, transferencia de procedimientos penales, tráfico ilícito por mar y otras formas de capacitación y cooperación.
Dado que los narcotraficantes buscan protección bajo leyes de sus países, la cumbre pedirá la extradición por delitos graves bajo el acuerdo de que los acusados puedan regresar a sus países de origen para cumplir las sentencias.
Uno de los temas de la cumbre es la necesidad de programas de cultivos alternativos que brinden nuevas fuentes de ingresos para los cultivadores ilegales.
En mayo de 1999, la ONU, en colaboración con varios países sudamericanos, realizará una conferencia de inversores internacionales para discutir un desarrollo alternativo.
Los participantes estudiarán proyectos que subrayen las ventajas de la inversión en producción agrícola en cultivos como cocoa, caucho y derivados de la palma.
Según el PNUFID, el consumo ilícito anual de drogas podría involucrar a entre 3,3 y 4,1 por ciento de la población mundial.
Desde la perspectiva de la salud, el consumo más serio es el de heroína. Aunque involucra a ocho millones de personas o 0,14 por ciento de la población mundial, su uso está en aumento.
La cocaína está más generalizada en términos del número total de consumidores, 13 millones de personas o 0,23 por ciento de la población mundial, aunque menos países están afectados.
La Cannabis Sativa (marihuana) es la droga más consumida, por alrededor de 2,5 por ciento de la población mundial, unos 140 millones de personas. (FIN/IPS/tra-en/td/mk/lp/ip/98