FINANZAS: El euro pasa la primera prueba en los mercados

El euro, la futura moneda única de la Unión Europea (UE), ganó hoy el voto de confianza de los operadores de cambios, superando temores de caos en los mercados tras su nacimiento el fin de semana.

Muchos analistas indicaron que la falta de confianza en el futuro de la nueva moneda se mediría en el aumento de la libra británica si los inversores retiraban sus capitales de las 11 monedas de la UE a fusionarse en el euro el 1 de enero de 1999.

Se esperaba que las inversiones se dirigieran al dólar o monedas que, como la libra británica, no se fusionarán en el euro.

Pero la libra cambió poco frente al dólar y el marco alemán. Este lunes fue feriado nacional en Gran Bretaña, pero la mayoría de los operadores de Londres, sede del mayor mercado cambiario del mundo, llegaron a sus oficinas para seguir de cerca la situación.

Muchos operadores aguardan para ver como evoluciona la situación, a la vez que esperan un prometido aumento en las tasas de interés alemanas, diseñado para que los mercados retengan la confianza en el marco y en el nuevo euro.

Las altas tasas de interés se convertirían en una práctica generalizada entre los 11 países miembros del euro.

Una cumbre de líderes convocada para lanzar una moneda única para la Unión Europea casi fracasó antes de que los países acordaran en la mañana del domingo, tras 11 horas de debates, quién dirigiría el banco transnacional que controla al euro.

El holandés Wim Duisenberg será el presidente del nuevo Banco Central Europeo, que controlará las tasas de interés y la política monetaria de las 11 naciones del euro, a condición de que en el 2002 entregue su puesto al francés Jean-Claude Trichet.

Las monedas y billetes euro deberán estar en circulación en el 2002.

El tratado de Maastricht sobre la unión monetaria y política de la UE indica que el presidente del Banco central se designará para un período de ocho años.

Pero el presidente de Francia, Jacques Chirac, insistió en que el banco debía ser dirigido por un francés, y dijo que vetaría a Duisenberg si este no abandonaba el cargo antes de lo previsto.

A pesar de las objeciones de Francia, Duisenberg, la opción de los otros 10 estados europeos, se ganó rápidamente la confianza de financistas internacionales y operadores del mercado de valores, quienes lo ven como garante de una estricta política monetaria y salvaguardia de la independencia del nuevo Banco Central, a diferencia de Trichet.

En el 2002, unos 300 millones de personas estarán gastando euros desde Irlanda hasta la frontera entre Finlandia y Rusia bajo la nueva agrupación monetaria.

La llamada "Eurolandia" será la mayor potencia comercial, con más de 18 por ciento del comercio mundial y casi un quinto de la producción del planeta, un porcentaje similar al de Estados Unidos.

El canciller (jefe de gobierno) alemán Helmut Kohl dijo que las negociaciones en Bruselas durante el fin de semana representaron "algunas de las horas más difíciles en mi experiencia".

Chirac manifestó que "me hace feliz que Francia lograra sacar ventaja. Esto fue importante no por nacionalismo, sino por realismo". Duinsberg también trabajará con una autoridad del Tersoro francés, Christian Noyer.

Mientras, el público alemán no cree que el euro será tan fuerte como el marco, y duda de que el banco bajo control francés será tan imparcial como el actual banco central alemán Bundesbank. Kohl enfrenta una elección general en septiembre, cuando se hará evidente la posición popular alemana.

Gran Bretaña, Suecia y Dinamarca decidieron mantenerse fuera de la moneda única, mientras Grecia no pasó las pruebas económicas requeridas para la integración.

La próxima prueba del euro la pondrá el Parlamento Europeo, que esta semana deberá aprobar la nominación de Duisenberg.

El presidente del Parlamento, José María Gil-Robles, aunque admitió que el acuerdo puede ser legal bajo el Tratado de Maastricht, dijo "no tener dudas" de que el período compartido de la presidencia viola el espíritu del tratado.

"Diría que no es nada bueno que el Banco Central empiece de esa manera", dijo el domingo Gil-Robles. "Esperemos que el bebé que acaba de nacer se recupere y fortalezca en el futuro".

"Para tener éxito, esta moneda deberá ser fuerte y respetar el acuerdo", admitió el mismo día el anfitrión de la cumbre, el primer ministro británico Tony Blair. (FIN/IPS/tra-en/rj/lp/if ip/98

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe