La represa de Theun-Hinboun fue construida para darle a Laos energía y divisas, pero un informe divulgado en la víspera de la inauguración de la obra reveló que ésta amenaza la subsistencia de los habitantes locales, forzándolos a emigrar.
El informe dado a conocer el viernes por la Red Internacional para los Ríos (IRN) pide una revisión del proyecto eléctrico argumentando que desde el momento en que se completó la represa, en enero de este año, comenzaron a sentirse los efectos negativos del proyecto.
La represa de 210 megavatios, cuyo inicio oficial de operaciones fue previsto para este sábado 4, es el resultado de un proyecto que involucró al Banco de Desarrollo de Asia (ADB) y a la empresa Nordic Hydropower.
Hasta el momento había sido descrita como un proyecto beneficioso que permitiría exportar energía hacia Tailandia y por lo tanto generar las divisas que Laos tanto necesita. También se subrayó que su construcción no implicó crear grandes lagos ni requirió la reubicación masiva de personas.
El IRN, que tiene su sede en Estados Unidos, realizó un estudio de campo en 10 aldeas de la zona, donde fueron entrevistadas 60 personas. "Todas sin excepción se quejaron de los efectos negativos del proyecto", afirmó el investigador Bruce Shoemaker.
La consecuencia más perniciosa de la construcción de la represa fue una reducción de 30 a 90 por ciento en la captura de peces en el río Theun, que para la mayoría de los habitantes de esa región es fuente de alimentos y de ingresos.
"Los peces desaparecieron. El año pasado la pesca era buena, comíamos los pescados y nos sobraba para vender, pero ahora la situación es terrible, ya casi no hay pescado", se lamentó un residente de Vang Dao, aldea ubicada río abajo del lugar donde se levanto la hidroeléctrica.
Desde que se cerró la muralla de la represa y se desvió el curso del río, los habitantes se quejan de que el nivel de las aguas del Theun bajó drásticamente.
Mientras el nivel del agua desciende río abajo, río arriba se produce el efecto contrario, y los pescadores se ven obligados a comprar costosas redes para realizar capturas en aguas profundas, mientras se inundan sus plantaciones de vegetales que tradicionalmente ocupan las riberas.
El cambio en los niveles del agua se debe a que la represa aprovecha la diferencia de altura entre las cuencas de dos ríos sacando agua del río Theun y canalizándola a través de un túnel de 5,2 kilómetros que permite ganar fuerza y mover las turbinas de los generadores antes de vertirla sobre el río Hai.
Los pobladores de la cuenca del Theun también se quejaron de la disminución del agua potable en la época seca, dificultades de transporte creadas por la existencia de niveles de agua diferentes, y la obligación de mudar casas, a veces aldeas completas, para escapar a las consecuencias negativas de la represa.
El IRN admitió que Theun-Hinboun tiene un potencial generador de ingresos mucho mayor que otros proyectos hidroeléctricos en Laos, pero advirtió que si se ignoran los costos sociales y ambientales, y no se destinan recursos para paliarlos, "no puede ser considerado como un modelo bueno, exitoso y sustentable".
El Banco de Desarrollo de Asia participó con un préstamo de 60 millones de dólares en este proyecto. En la última edición de su publicación "ADB Review" admitió que aún debe evaluarse "el impacto sobre la vida acuática a ambos lados de la represa".
Pero el mismo artículo expresa la satisfacción del ADB por haber respaldado un proyecto exitoso que además "no contempló la inundación de terrenos, ni la creación de grandes depósitos de agua, ni la necesidad de reubicar a las personas".
Algunos representantes del Banco habían comentado con anterioridad que el proyecto ni siquiera debería considerarse como "una represa", pues no genera grandes acumulaciones de agua.
Además, es la primera vez que el gobierno de Laos hace una alianza con el sector privado y el ADB para realizar un proyecto hidroeléctrico. ADB Review asegura que la participación del Banco fue importante para atraer inversión extranjera, en un momento en que los capitales desconfiaban de Laos.
Cerca de 95 por ciento de la energía generada por este proyecto hidroeléctrico será exportada a Tailandia, lo cual convertirá a Theun-Hinboun en una de las principales fuentes de divisas para Laos. El restante cinco por ciento será utilizado para abastecer pueblos y aldeas de la zona.
Laos espera que en el 2005 estará en condiciones de exportar 5.000 megawatts de energía a Tailandia y Vietnam.
El proyecto de Theun Hinboun es uno de los muchos que se barajan para la región del río Mekong y sus tributarios, y forma parte del renovado interés que existe en Indochina por la generación de hidroelectricidad, en el marco de la implantación de economías de mercado iniciada hace algunos años.
Theun-Hinboun pertenece a un grupo de ocho proyectos de energía prioritarios para la zona que forma parte de la subregión del Gran Mekong, un área hacia la cual el ADB confía en estimular el flujo de inversiones extranjeras.
El IRN argumenta que los problemas detectados en la represa permiten cuestionar los cálculos en que se basó el proyecto, y menciona que no se consideraron recursos para reubicar a las personas afectadas, ni la responsabilidad de accionistas extranjeros en procesos de desintegración económica y social.
Aunque tanto el ADB como la empresa a cargo del proyecto, la Theun-Hinboun Power Co., insisten en que no es necesario reubicar a los habitantes de la zona, el IRN asegura que ya comenzaron a detectarse los desplazamientos de personas, un proceso que podría agudizarse en el futuro.
El proyecto tuvo un costo de 260 millones de dólares, de los cuales sólo 2,59 millones de dólares fueron destinados a financiar acciones de mitigación de efectos por su construcción.
Sólo se destinaron 50.000 dólares a reubicaciones y compensaciones, aunque parte de esos fondos se ocuparon para comprar el terreno donde se instalan las torres de transmisión.
El IRN dijo que la cantidad está muy por debajo de las necesidades, y recordó con preocupación que en 1996 se firmó un acuerdo en el cual se eximía a la empresa hidroeléctrica de pagos por compensación durante los 30 años de funcionamiento previstos en el proyecto.
Lo más probable es que el gobierno de Laos no pueda hacerse cargo de la mitigación de los efectos de la represa.
El informe del IRN asegura que los costos reales de este proyecto, considerando aspectos económicos, sociales y ecológicos, están por encima de las estimaciones y deben ser afrontados, ya que se trata de habitantes de Laos "sin recursos ni alternativas de vida". (FIN/IPS/tra-en/js/lc-ml/en-pr/98