Cinco empresas administradoras de fondos de retiro con amplia participación en América Latina iniciaron hoy operaciones con miras a captar los aportes sociales de aproximadamente 500.000 trabajadores salvadoreños.
En cuatro de las cinco administradoras de fondos de pensiones (AFP) participan empresas de España como el Grupo Argentaria y el Banco Bilbao Viscaya. De Chile participa Provida Internacional, que maneja 16 por ciento de los fondos de retiro latinoamericanos.
Otro socio importante es el Citibank, que administra 17 por ciento de los fondos de pensión de la región y cuenta con 15 por ciento del total de afiliados a ese sistema, según datos de sus representantes en San Salvador.
El gobierno salvadoreño confía en que el funcionamiento de estas empresas dará un mayor dinamismo al mercado de valores, porque, según las estimaciones, a finales de 1998 habrán invertido aproximadamente 200 millones de dólares.
También confía en que el sistema permita aumentar el ahorro interno, pues la ley que dió vida al sistema privado -vigente desde enero de 1997-, obliga a las AFP a invertir 90 por ciento del dinero que manejen en instrumentos bursátiles.
La directora de la Superintendencia de Pensiones, Francia Prevé, aseguró el lunes que el nuevo sistema "es y será la reforma histórica más impactante del desarrollo de El Salvador de los últimos diez años".
Por su parte, el superintendente de Valores, Oscar Pérez, aseguró que uno de los más importantes beneficios del nuevo modelo será la modernización de la infraestructura del mercado de valores.
Mayor estabilidad en el mercado de valores con la emisión de títulos a largo plazo y una baja sensible en las tasas de interés son los resultados que se pueden esperar a mediano plazo.
La entrada en funcionamiento de las administradoras abrirá mercado para los títulos de largo plazo y, a la vez, los recursos que las empresas inyectarán a la economía provocarán la baja de las tasas de interés.
Sin embargo, no todos los sectores están satisfechos con el traslado del manejo de los fondos de pensión del Estado a la empresa privada.
El principal partido de oposición, el ex guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), impulsa con respaldo de otras dos organizaciones la propuesta de congelar durante varios meses la vigencia del nuevo sistema previsional.
El argumento principal del FMLN es que la ley debe dejar abierta la posibilidad de que los trabajadores coloquen sus fondos de pensión en un sistema público o mixto, y no sólo en las administradoras privadas.
Los ex guerrilleros insisten en que el Estado puede seguir administrando fondos de pensión, sin importar la competencia con las administradoras privadas, con lo cual se crearía un sistema mixto.
Cincuenta organizaciones sindicales pidieron el año pasado la derogación de las dos leyes que rigen el sistema, por su supuesto carácter inconstitucional.
La Constitución identifica la seguridad social como un servicio público de carácter obligatorio, y el parlamento debe promulgar una ley interpretativa de ese artículo, señalaron los sindicalistas.
Ileana Rogel, diputada del FMLN, agregó que el sistema contiene debilidades que es necesario corregir, por lo cual respaldó la iniciativa de varios parlamentarios de congelar las dos leyes por un mínimo de cuatro meses y un máximo de seis.
Esas propuestas fueron consideradas "inoportunas" por las administradoras privadas.
Edwin Sagrera, presidente de AFP Confía, afirmó que las leyes han estado vigentes desde enero de 1997 y, por lo tanto, hubo suficiente tiempo para analizar posibles cambios.
Reformar el marco jurídico en este momento, advirtió Sagrera, daría una señal negativa a las empresas extranjeras que invirtieron en El Salvador. (FIN/IPS/mso/ff/if lb/98