Ningún representante de Africa subsahariana participa este año en los debates del cuerpo especializado en racismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que comenzaron hoy.
El Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación Racial comenzó su primer período anual de sesiones con una composición de miembros favorable a los países occidentales.
De los 18 miembros del organismo, 10 proceden de países de Europa, cuatro de América Latina, tres de Asia y solo uno, el egipcio Mahmoud Aboul-Nasr, de Africa.
La ausencia de representantes de Africa meridional fue considerada por los demás integrantes un problema delicado para el cuerpo, que se suma a la escasa participación de mujeres, apenas tres, en el organismo.
El presidente saliente del Comité, el británico Michael Parker Banton, estimó que la distribución de los asientos "crea un panorama muy serio".
La experta india Shanti Sadiq Alí calificó la situación de "trágica", porque la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial establece que "todas las civilizaciones deben estar representadas" en el Comité.
"Pero Africa no tiene representación y la composición del comité está dominada por Europa", recalcó Sadiq Alí.
Los dos últimos representantes de Africa subsahariana ante el comité, Hamzat Ahmadu, de Nigeria, y Andrew Chigovera, de Zimbabwe, se retiraron del organismo en 1997.
En su reemplazo, los estados miembros de la Convención designaron a Gay Mcdougall, de Estados Unidos, y a Peter Nobel, de Suecia. Mcdougall, Sadiq Alí y la experta china Zou Deci son las únicas mujeres integrantes del comité.
Sadiq Alí dijo que los estados miembros "no designan mujeres porque piensan que" los asuntos que trata el Comité "no tienen nada que ver con ellas".
Pero la ausencia de delegados de Africa subsahariana obedece a problemas internos del bloque subregional, dijeron fuentes de organismos de derechos humanos.
El venezolano Enrique Ter Horst, Alto Comisionado adjunto de la ONU para los Derechos Humanos, explicó que los delegados gubernamentales de Africa subsahariana no se pusieron de acuerdo para designar representantes en la reunión de estados miembros de enero, en Nueva York.
"Los países africanos no están bien organizados. Tenían muchos y muy buenos candidatos, pero no llegaron a un consenso", dijo el miembro del comité Theodoor van Boven, de Holanda.
El problema del consenso se presentó por primera vez en el comité de discriminación racial, pero ya le había ocurrido antes a los africanos en otros organismos especializados, como la Comisión de Derechos Humanos y el Comité de Derechos Humanos, recordó Van Boven.
Los miembros del comité son expertos independientes, pero propuestos por los gobiernos de sus países y elegidos por todos los estados partes de la convención sobre discriminación racial.
Ese procedimiento de designación crea "gran compromiso político", lamentó Van Boven, un experto en derechos humanos de notoria actuación durante las dictaduras militares de los años 70 en América del Sur.
El panorama se complicó para el comité porque en el actual período de dos años, iniciado este lunes, la presidencia del organismo correspondía a un representante africano.
El comité eligió finalmente al egipcio Aboul-Nasr, quien aseguró que rehusó hasta último momento la designación en señal de disconformidad con la integración del comité.
Aboul-Nasr declaró a IPS que en la composición del organismo predomina la representación cultural occidental, en la que incluyó a europeos del este y del oeste, a la delegada estadounidense y a los latinoamericanos.
El experto egipcio sostuvo que la escasa presencia de asiáticos y africanos en el comité contradice los principios de la convención de una representación equilibrada entre todas las civilizaciones, culturas y sistemas legales.
Van Boven compartió el criterio de que el comité tiene una composición desequilibrada pero objetó que "represente los intereses occidentales".
El comité para la eliminación de la discriminación racial ha adoptado posiciones muy críticas respecto de Occidente y "aunque sus miembros estén influenciados por sus antecedentes no hacen forzosamente el juego occidental", estimó van Boven.
El problema no se reduce a la discriminación racial porque también existe en casi todos los países violencia étnica, que el comité se ha encargado de censurar. Eso le ha valido muchas críticas al organismo, refirió.
El comité, responsable de velar por el complimiento de la convención sobre la discriminación racial, eligió vicepresidentes a Mario Jorge Yutzis, de Argentina, Ion Diaconu, de Rumania, y Michael Sherifis, de Chipre. (FIN/IPS/pc/mj/hd pr/98