El rechazo a los pobres y la exclusión social no son un producto colateral del desarrollo contemporáneo sino "algo enraizado en el núcleo de la cultura moderna", afirmó hoy en Venezuela el superior general de los jesuitas, el holandés Peter-Hans Kolvenbach.
El jefe de los 23.000 jesuitas diseminados por el mundo, apodado el "papa negro" por su poder e influencia dentro de la Iglesia Católica y por la indumentaria de la Orden, inició con una conferencia sobre "La opción por los pobres" su semana de visita a esta "provincia" de la Compañía de Jesús".
En América Latina, la opción por los pobres y los marginados, pautada por la conferencia episcopal de Puebla en 1979, "no es una fórmula vacía sino fermento eficaz de propuestas sociales y políticas", según Kolvenbach.
Kolvenbach no detalló esas propuestas, pero tras destacar que "las intolerables desigualdades económicas y sociales han sido denunciadas por los papas", afirmó que la opción por los pobres "es contradictoria con la figura histórica vigente, que no los menciona, y los excluye".
"Hay una tendencia a suprimir a los pobres y se tiende a organizar la convivencia de tal manera que se pueda pasar toda la vida sin contacto con ellos, reducidos dentro de eufemismos como el llamado costo social", deploró.
Como ejemplo, Kolvenbach dijo que "hoy se construyen fuera de las ciudades villas enteras sin contacto con los pobres", y en medio de la sed de ganancia y afán de poder "se afianza una cultura en la que los pobres carecen de fuerza".
Ese rechazo a los pobres "no es un producto colateral del desaarrollo actual sino algo enraizado en el núcleo de la cultura moderna", lo que contrasta con "el plan de Dios, expresado a lo largo de los siglos, de que este mundo ha sido creado para que lo disfruten todos los seres humanos".
Los pobres "tienen que vivir en medio de una cultura que mide la felicidad por el tener todas las cosas de las que ellos carecen. Soportando, además, la constante y masiva publicación de todo lo que no pueden comprar".
Para la gente de la clase media, alta, para el clero y sus instituciones, optar por los pobres es entregar, más que cosas, la propia persona. Pero "no es posible darse sin dar también un poco de lo que se tiene", a la vez que los poseedores pueden "permanecer en su propio dinamismo económico".
Jesucristo, dijo Kolvenbach, deja todo lo que tiene y lo entrega a los pobres. "Este no es un mandato, pero sí muestra un camino".
Recordó que según la Conferencia de Puebla "el mejor servicio a los pobres es la evangelización, y la alianza con los pobres es la realización de lo que se proclama".
"Si el pobre acepta esa relación de alianza, ya no se siente excluido sino reconocido, no solo sino acompañado, ya no en desgracia sino en gracia de Dios, que le acompaña en las buenas y en las malas", agregó el jefe de la Compañía de Jesús.
Si los pobres carecen de sabiduría o riqueza, "Dios, al reconocerlos, no es el dios de los ricos o el de los poderosos. Dios opta por los pobres", remarcó.
Aunque "mientras haya historia habrá pobres y marginados, no es posible decir que Dios ha creado la miseria para que se salven los pobres", sentenció.
"El señor en el Evangelio no dice una sola palabra a favor de la miseria", dijo Kolvenbach. "Y el hombre tiene los recursos económicos y técnicos para hacer un mundo más justo. Si no lo hace es porque no quiere".
Kolvenbach se entrevistó con el presidente Rafael Caldera, de 82 años y un ex alumno jesuita, y en sus nueve días en Venezuela va a visitar, en distintos puntos del país, escuelas, universidades, parroquias y centros de acción social y comunitaria activados por los jesuitas.
El jesuita holandés, de 54 años, comanda su congregación desde 1983, cuando fue elegido como 29 superior general de la Compañía, en sucesion al combativo español Arrupe.
Experto en Medio Oriente, donde fue provincial jesuita largos años desde Beirut, también se ocupó durante amplios períodos a los problemas de los refugiados de guerra y en el aliento a la integración de las distintas iglesias. Habla correctamente o entiende 10 idiomas. (FIN/IPS/jz/dg/cr-ip/98)
