Taiwan saca partido de la crisis financiera en Asia, en un intento de ganar aliados políticos y diplomáticos a cambio de ofrecer inversiones y créditos a las azotadas economías de la región, según el gobierno de China.
La última visita a Filipinas e Indonesia del primer ministro de Taiwan, Vincent Siew, provocó una renovada furia de Beijing, que rutinariamente protesta cuando autoridades taiwanesas van de gira por Asia.
Mientras Siew visitó Manila y Jakarta por conversaciones políticas la semana pasada, diarios oficiales chinos advirtieron a Taipei que no capitalizara el torbellino financiero en los países Asiáticos, ninguno de los cuales tiene lazos diplomáticos con Taiwan, aunque este es el mayor inversor en muchos de ellos.
En más de una ocasión Beijing acusó a Taiwan de usar ayuda económica para ganar socios en sus intentos de sumarse a organizaciones internacionales clave como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), y el foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
Las autoridades chinas no pierden de vista que en medio del colapso de las monedas de la región, el dólar taiwanés permaneció relativamente inalterado. A la vez, Taiwan parece estar haciendo grandes compras en toda la región, sacando ventaja de la caída vertiginosa de los precios causada por las devaluaciones.
Beijing cree que esto no es más que un intento de Taiwan de comprar aliados políticos con la oferta de asistencia económica.
Una delegación de unos 80 empresarios industriales de Taiwan liderados por Chiang Ping-kun, presidente del Consejo de Planificación y Desarrollo Económico, de nivel ministerial, hizo un recorrido por Tailandia, Filipinas, Malasia e Indonesia.
La delegación acompañó a Siew a Manila y Jakarta en busca de nuevas oportunidades de negocios.
Benny Hu, presidente del brazo empresarial del Kuomintang (partido nacionalista) de Taiwan, declaró hace poco al diario China News de Taipei que "esta es la peor crisis financiera en Asia, y una oportunidad única en la vida. Si no sacamos ventaja, la gente podría preguntar luego por qué la dejamos pasar".
Aunque el grueso de las inversiones de CDC aún se encuentran en Taiwan, Taipei no oculta el hecho de que qusiera que los empresarios invirtieran más en el sudeste de Asia para reducir la dependencia económica de China continental.
La inversión de Taiwan en países del sudeste asiático era 37.100 millones de dólares a fines de septiembre de 1997, pero el alto crecimiento en las inversiones regionales se registró en la década de 1980.
El gobierno de Taiwan creó un fondo de préstamos de 50.000 millones de dólares para ayudar a los gobiernos regionales necesitados.
El vicegobernador del Banco Central de Taiwan, Liang Cheng- ching, dijo a inversores taiwaneses durante el viaje de la delegación a Manila que Taipei está listo para extender 20 millones de dólares en créditos a bancos en Filipinas para ayudar a los negocios locales.
Sin embargo, a su regreso de Jakarta, Siew señaló que "ninguno de los cuatro gobiernos visitados por la delegación expresó demandas de préstamos o dinero en efectivo, y todo lo que se hizo fue intercambiar experiencias y opiniones sobre la forma de enfrentar la crisis".
Pero el primer ministro destacó que los países del sudeste manifestaron interés en que inversores taiwaneses continúen dando empleo y aumenten las inversiones en la región.
Taipei ya destinó hasta 1.200 millones de dólares de su banco central para respaldar inversores de Taiwan en la región.
Pero no todos parecen creer que la "diplomacia monetaria" es el camino a seguir. Los empresarios no se lanzaron sobre las oportunidades a pesar de precios tentadores, en especial en casas financieras y hoteles.
Aunque hay informaciones de que empresarios taiwaneses están interesados en comprar hoteles cinco estrellas en Tailandia y Corea del Sur, algunos dejaron en suspenso sus planes para una nueva planta en Tailandia.
La mayoría de los inversores taiwaneses cree que los riesgos aún son demasiados en la región, y que son posibles nuevas caídas de precios.
Las monedas de Malasia, Tailandia, Indonesia, Filipinas y Corea del Sur cayeron entre 30 y 70 por ciento en las últimas semanas, brindando oportunidades baratas de inversión para empresarios taiwaneses, cuya moneda cayó 20 por ciento en el mismo período.
Los inversores también temen disturbios sociales en Tailandia e Indonesia.
Algunos analistas señalan que los países asiáticos, en particular Indonesia y Malasia, ven con disgusto que extranjeros ricos compren sus activos cuando los precios están por el suelo. "Es una cuestión de orgullo", dijo un corredor de bolsa taiwanés instalado en Taiwan.
Aunque Taiwan está dispuesto a ofrecer ayuda como parte de un esfuerzo regional para estabilizar las monedas, la oposición política se resiste a entregar la asistencia, en particular a Corea del Sur, que en 1988 estableció lazos diplomáticos con China dejando a Taiwan. (FIN/IPS/tra-en/ys/ral/lp/if ip/98