Brasil aumentó en 69 por ciento su volumen de exportaciones de café en los siete primeros meses de este año, pero esa expansión debe reducirse a 27 por ciento a fin de año, en comparación con 1996.
La previsión, divulgada este miércoles por la Asociación Brasileña de Exportadores de Café (Abecafé), se basa en los resultados de julio y en la limitada disponibilidad del producto.
En el mes pasado las exportaciones alcanzaron 1.032.044 sacos de 60 kilos, 12 por ciento menos que en julio de 1996. Los ingresos, sin embargo, aumentaron 36,8 por ciento, alcanzando 212,4 millones de dólares, como consecuencia de mejores precios.
De enero a agosto Brasil acumuló 8.569.807 sacos exportados por 1.597 millones de dólares. En igual período del año pasado obtuvo menos de la mitad, solamente 730 millones de dólares.
El promedio de precios en julio, 205,80 dólares el saco, registró una caída de la cotización en relación al mes anterior, cuando alcanzó 216,21 dólares, culminando sostenidos aumentos en todo el primer semestre.
La Abecafé espera que las exportaciones alcancen 16,5 millones de sacos de café en grano este año, una cantidad escasamente inferior a la registrada en los mejores años.
Los exportadores brasileños se dividieron en dos asociaciones. Las cifras divulgadas por la Federación de Exportadores de Café discrepan ligeramente de las difundidas por la Abecafé, pero registran las mismas tendencias.
La Febec estimó un aumento de 73 por ciento en el volumen exportado en los siete últimos meses y de 122,75 por ciento en los ingresos obtenidos, que habrían alcanzado 1.579 millones de dólares. (FIN/IPS/mo/dg/if/97
