Organizaciones de mujeres indígenas del oriente de Bolivia se han propuesto rescatar una especie de algodón en extinción y recuperar técnicas tradicionales de hilado practicadas por sus antepasados.
Habilidosas artesanas del tejido, las mujeres de la Chiquitanía – región conocida por las iglesias de las Misiones Jesuíticas de la colonia- habían comenzado a olvidar la forma de hacer sus tejidos ante la desaparición paulatina del algodón arbóreo, materia prima que sustentaba su oficio.
La acelerada expansión de la frontera agrícola y la habilitación de áreas para el pastoreo de vacas y caballos han provocado la pérdida de este recurso genético antes abundante.
El proyecto "Recuperación de Germoplasma de Algodón Arbóreo", del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), despliega en comunidades indígenas de la provincia Ñuflo de Chávez, del departamento de Santa Cruz, un proceso de recuperación del algodón arbóreo.
Con la participación técnica del no gubernamental Centro de Investigación y Manejo de Recursos Naturales Renovables se han consolidado 2.300 plantas en 13 comunidades indígenas de la región de Chiquitanía, en un proceso de multiplicación de nuevas plantaciones.
En esa tarea de rescate de germoplasma, así como en los cursillos de capacitación de productores y artesanos en la comercialización del producto, participan por igual hombres y mujeres.
"Evaluamos permanentemente la producción del algodón y observamos el número de bolos, el peso, el tamaño de la fibra, y la resistencia", asegura Gualberto Saravia, técnico del Centro de Investigación de Agricultura Tropical que participa en la asistencia especializada del proyecto.
En los talleres complementarios de recuperación de técnicas y procedimientos tradicionales de hilado caídos en el olvido la participación de la mujer es preponderante.
El proyecto cumple así otra de las metas de esta empresa, que es precisamente la incorporación activa de la mujer al proceso productivo.
"De niña veía a mi madre que hacía todo el trabajo: sembraba el algodón, lo hilaba, lo teñía y después lo guardaba en ovillos para preparar los tejidos. Ahora, queremos transmitir este mismo conocimiento a las jóvenes y preservar la tradición por siempre", dice Natalia, una anciana instructora de talleres.
Otro de los objetivos del proyecto es incorporar el proceso de producción de algodón y tejidos a la vida cotidiana de las comunidades indígenas de Chiquitanía, para conseguir la autogestión y sostenibilidad.
"Me senté, miré cómo tejía. Yo sólo tejía en forma muy simple. Me fui a casa y tenía que tener una hamaca sencilla nomás. Probé a urdir conforme yo había visto en el taller y así aprendí", relata a IPS Eusebia Suárez, joven chiquitana de conocimientos muy elementales, como es el caso de toda su comunidad.
El proyecto Recuperación de Germoplasma de Algodón Arbóreo integra un paquete de emprendimientos muy peculiares del PNUD: el Programa de Pequeñas Donaciones (PPD), que se desarrolla en 33 países.
El PPD asigna particular importancia a las iniciativas en las que se destaca la participación de las comunidades y los pueblos indígenas.
Apunta a fortalecer las organizaciones tradicionales y a crear nuevas nuevas dinámicas de producción adecuadas a las necesidades actuales de comunidades étnicas del oriente y occidente del país.
En la etapa de selección de este tipo de proyectos, son las propias comunidades las que en asambleas, encuentros y cursillos identifican sus principales requerimientos, evalúan los contenidos y alcances del proyecto y diseñan soluciones.
En ese proceso, con frecuencia la mujer se convierte en la principal protagonista de la ejecución del proyecto.
"En la ciudad se habla de 'equidad de género' pero nosotros ya practicamos aquí desde tiempos inmemoriales la igualdad de derechos y responsabilidades entre hombres y mujeres", dice Faustino Yepes, oriundo de Ñuflo de Chávez.
El PPD es financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial y se desarrolla en Bolivia bajo la co administración del PNUD y la no gubernamental Liga de Defensa del Medio Ambiente de Bolivia (Lidema).
En la selección de proyectos del PPD participan, además del PNUD y el Lidema, organizaciones no gubernamentales que realizan trabajo social, confederaciones indígenas y el Ministerio de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente. (FIN/IPS/jcr/dg/en-pr-08-97