/REPETICION/ (Artes y Espectáculos) CINE: Hollywood desafía identidad nacional de europeos

La aplastante hegemonía de Hollywod en la industria mundial del cine desafía la identidad nacional de países de todos los continentes, advirtió el productor británico David Puttnam, ganador del Oscar.

Así mismo, el triunfo de Estados Unidos sobre Europa en la guerra por el control de la distribución mundial de películas representa la derrota del cine concebido como arte, afirmó Puttnam, el único europeo que estuvo al frente de un estudio del Hollywood contemporáneo.

El productor británico explica en "La guerra no declarada", un libro publicado por la editorial Harper Collins, cómo Hollywood llegó a controlar la industria del cine, nacida de una invención europea.

La primera película de la historia, "Obreros saliendo de la fábrica Lumière", fue exhibida en 1894 en la ciudad francesa de Lyon por los hermanos Auguste y Louis Lumière.

Puttnam, que produjo varias películas premiadas, como "Los Gritos del Silencio", "Expreso de Medianoche", "Carros de Fuego", "Local Hero" y "La Misión", señala que Europa intentó hacer del cine un arte, mientras la producción de Estados Unidos se caracteriza por su fuerza comercial.

Las películas de Hollywood representan al menos 80 por ciento de la oferta en la mayoría de los países europeos y más de 90 por ciento en algunos, observó el productor en la presentación de su libro, realizada en el Centro Fílmico Irlandés, de Dublín.

A la vista del consumo masivo en Europa de filmes rodados a más de 8.000 kilómetros de distancia, en un suburbio de Los Angeles, Puttnam se preguntó si "seguiremos siendo europeos". La respuesta "es dudosa", agregó.

El predominio de la concepción del mundo de Hollywood podría desestabilizar a algunas sociedades. El cine tiene un enorme mercado de clase media en India, que es la "sociedad más frágil del mundo", advirtió.

Así mismo, el cine estadounidense afectó la producción de cine árabe, que se concentraba en Egipto. Los valores de Hollywood se oponen al tipo de vida que promueve el Corán y los musulmanes irlandeses no sienten interés en asistir al cine, afirmó Mohammed O'Curnain, del Centro Islámico de Dublín.

"Parte del público renuncia al cine por los desnudos y el lenguaje soez y porque muchas películas fomentan el comportamiento inmoral, la violencia y la corrupción. Tenemos las mismas objeciones que las iglesias cristianas", dijo O'Curnain a IPS.

Puttnam fue presidente de Columbia Studios de 1986 a 1988 y estuvo en conflicto con poderosas estrellas estadounidenses y sus representantes. Por fin abandonó Hollywood, molesto y frustrado, y ha trasladado su experiencia a su libro.

"Los estadounidenses son torpes. No piensan como nosotros, no discuten nuestras ideas, y creen que el mercado resolverá la situación" de la industria fílmica, declaró.

Nick James, editor de la revista británica "Sight and Sound", concuerda con la dicotomía señalada por Puttnam entre el tradicional enfoque artístico del cine de Europa y la agresividad comercial de Hollywood.

Los realizadores europeos ignoraron muchas veces los deseos del público y fueron así "cómplices" en el proceso de pérdida de control de la industria frente a los estadounidenses, manifestó James.

"Fueron muy autosuficientes con el tipo de películas que hacían y yo sostengo que lo que se llama 'cine artístico europeo', ya no tiene la calidad que el nombre indica. Sencillamente, no es bueno y no justifica el tipo de veneración que la teoría de autor le brinda", agregó.

La teoría de autor es la que sostiene que el director de una película es el principal creador de la misma.

La industria fílmica europea está "en crisis" y la razón radica en la falta de una base industrial para hacer películas. La mayoría de los directores "son juzgados por el primer filme que hacen y ese es un juicio muy severo", dijo James.

Puttnam destacó la oportunidad que ofrecen "los nuevos sectores híbridos de multimedia", que borran las diferencias entre películas, televisión, video, telecomunicaciones y programas de computadora.

"¿Fabricaremos nuestros propios recursos de multimedia para la educación, o esperaremos a importarlos de Estados Unidos o de la cuenca del Pacífico?", se preguntó. (FIN/IPS/tra-en/so/aq- ff/cr/97

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