El gobierno M'exico prevé un aumento de 4,5 por ciento del producto interno bruto en 1997, pero analistas y empresarios opinan que si no se superan los problemas políticos y sociales la recuperación será endeble.
Enrique Villatela, director del estatal Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), dijo el viernes que aunque el índice de incremento productivo será inferior en 0,6 por ciento al de 1996 permitirá rebasar el nivel previo a la crisis de 1995.
Pero Jesús Sánchez Navarro, uno de los principales ideólogos de la iniciativa privada, llamó a no posponer una transición en materia sociopolítica, por ahora lenta, si se quiere evitar la repetición de caídas cíclicas permanentes de la economía.
Villatela admitió que es "desigual" el crecimiento observado en lo que va del año, "ya que muchas empresas, sobre todo las pequeñas y medianas, quedaron marginadas de sus beneficios, que tampoco se reflejaron en los bolsillos de la población".
Las firmas perjudicadas fueron las que no participan en el mercado externo, que representa casi un tercio del producto interno bruto, afirmó.
Sánchez Navarro afirmó en una conferencia dictada ante un foro universitario que el anterior gobierno del presidente Carlos Salinas (1988-1994), a la vez que puso en marcha privatizaciones masivas demoró la atención de necesidades básicas.
Sostuvo que el último año de gestión de Salinas "fue pleno de corrupción manifiesta, de crímenes, y de un autoritarismo que no tenía nada que ver con la voluntad popular".
Afirmó que la crisis se precipitó en diciembre de 1994 no sólo por la corrupción y los asesinatos políticos bajo Salinas sino también "por la mala estructura del Estado, la pérdida de confianza y el errático arranque del actual gobierno".
Consideró al primer gabinete del presidente Ernesto Zedillo, que asumió el 1 de diciembre de 1994, incapaz de resolver las dificultades de la coyuntura.
Según Sánchez Navarro "si lo político anda mal, tarde o temprano la economía se rinde".
Explicó que "la transición a la democracia debe permitir que cuando un gobierno se equivoca las autoridades cambien" y adujo que "si esto sucede, México tomará el camino correcto".
El día 19, el secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz, anunció que el producto interno bruto del primer trimestre de este año fue superior en más del cinco por ciento al del mismo lapso del anterior.
Sin embargo, el analista económico Juan Castaingts señaló que si se comparan las cifras de enero a marzo pasado con las del último trimestre de 1996 sólo hubo incrementos en los rubros de servicios (1,9 por ciento) y finanzas (2,7 por ciento).
En cambio bajaron los de construcción (10,1 por ciento), comercios, restaurantes y hoteles (9,2 por ciento), minería (3,9 por ciento), electricidad, gas y agua (2,4 por ciento), industria manufacturera (1,1 por ciento) y transporte (0,9 por ciento).
Otros datos negativos son para Castaingts el déficit creciente de la balanza comercial, la tendencia a sobrevaluar el peso, la depresión de las ventas al mayoreo y menudeo, la baja salarial, las altas tasas de interés y el aumento de la "cartera vencida".
La banca privada rechazó este fin de semana negociar con El Barzón, entidad que agrupa a dos millones de deudores morosos en cesación pagos por "cartera vencida", limitándose a prometer un tratamiento caso por caso.
El volumen total de los créditos adeudados por productores rurales, comerciantes, industriales, compradores de vivienda y poseedores de tarjetas de consumo alcanza un monto equivalente a más de 15.000 millones de dólares.
Mientras el año pasado se recuperó en parte el ritmo productivo, el poder de compra sigue bajando por el continuo descenso del salario real, lo que lleva a una polarización que eleva la violencia y la criminalidad, dijo Castaingts.
Según un reciente informe de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), México figura entre los cinco países latinoamericanos que presentan mayores deterioros en el esquema de distribución del ingreso.
El documento precisa que las expectativas cifradas en un nuevo proceso de crecimiento que permitiría revertir la situación de los años 80 "no se confirmaron".
La CEPAL señala que, junto con Argentina y Venezuela, México integra el trío de países que registró el mayor aumento de la pobreza y el desempleo desde fines de 1994.
"En 1995 y hasta marzo de 1996 el salario mínimo perdió en términos reales 25 por ciento y el índice del salario real del sector manufacturero cayó 20 por ciento", asegura el informe.
En tanto, el investigador Carlos Marichal, de El Colegio de México, subrayó en diálogo con IPS que la deuda externa mexicana suma hoy unos 160.000 millones de dólares, 47 por ciento del producto interno bruto anual.
Marichal calificó el problema como "una hipoteca que no será fácil librar para la economía ni para la sociedad que la sostiene, pues no debe olvidarse que son las personas quienes sostienen la economía y no al revés". (FIN/IPS/emv/ag/ip-if/97