Nigeria celebrará la segunda ronda de sus elecciones locales este jueves, en medio de un atolladero político y acusaciones contra el organismo a cargo de la supervisión del programa de transición a la democracia.
El general Jeremiah Useini, considerado el segundo hombre más poderoso del país africano, ignoró la anulación de los comicios celebrados el 15 de marzo dispuesta en tres jurisdicciones por las autoridades electorales, e impuso en los consejos locales a los candidatos que, según él, resultaron ganadores.
Pero el desafío a la Comisión Nacional Electoral (NECON) por parte de Useini, jefe de gobierno de Abuja, la capital, no es la única nube que ensombrece los comicios. También se efectuaron numerosas denuncias de fraude, sobornos, "compra" de votos e intimidación de electores.
Los problemas en torno a las elecciones convocadas para este martes en 147 gobiernos locales son apenas una pequeña muestra de lo que espera al país africano en su camino hacia la instauración de un régimen democrático, cuya culminación está prevista para octubre de 1998.
La NECON dispuso la celebración de segundas rondas entre los dos candidatos más votados en las localidades donde no hubo ganadores claros el 15 de marzo.
Pero en otras tres jurisdicciones, todas ellas pertenecientes al Territorio de la Capital Federal, la NECON anuló la primera ronda electoral debido a presuntas irregularidades y convocó a nuevos comicios que deberán celebrarse este martes.
En total, quedaron sin determinar 147 de los 774 gobiernos locales en disputa.
Los cinco partidos que compiten con el aval del gobierno se acusan unos a otros de haber "comprado" votos o intimidado a los electores en marzo.
El Partido del Congreso Unido de Nigeria (UNCP) conquistó 308 de las 774 presidencias de gobiernos locales el mes pasado.
El partido que obtuvo peores resultados, el Movimiento Democrático de las Bases (GDM), que ganó 42 presidencias, afirma que hubo irregularidades.
Gambo Lawan, presidente del GDM, dijo que su partido se presentó a las elecciones "con la esperanza de que hubiera justicia y juego justo" en los procedimientos. Pero, por el contrario, hubo "compra" de votos y sobornos a funcionarios electorales para amañar los resultados, sostuvo.
El Congreso por el Consenso Nacional (CNC), que obtuvo 58 presidencias de gobiernos locales, afirmó que los partidos cayeron en prácticas cuestionables.
"Es evidente que algunos echaron mano a publicidad perniciosa durante la campaña con el objetivo de intimidar a millones de votantes", dijo el secretario nacional de propaganda del CNC, M. C. K. Ajuluchukwu.
"El CNC se siente terriblemente entristecido por este nuevo episodio de fraude electoral. Muchos de los perpetradores de estos reprobables actos son hombres que en el pasado sumieron a Nigeria en oscuros abismos y la hicieron merecedora de la burla internacional", agregó Ajuluchukwu.
El Partido Democrático (DPN) ganó 173 presidencias de gobiernos locales, y el restante competidor, el Partido Nacional Centrista (NCPN), obtuvo 46.
Mogaji Abdullahi, del NCPN, dijo que los resultados de marzo no reflejan la fortaleza de su partido, pues, aseguró, se registraron claras irregularidades, desde intimidación a electores a descalificación de candidatos cuando faltaban pocas horas para la jornada electoral, aseguró.
Las protestas podrían derivar en la integración de tribunales electorales encabezados por jueces de alta jerarquía, como ya sucedió en 36 jurisdicciones del país.
El desencanto de electores y candidatos generó violentas protestas durante dos semanas en la ciudad de Warri, ubicada en un delta en medio de una rica zona petrolera.
Las elecciones de este jueves serán la prueba de fuego la autoridad y la independencia de la NECON, en especial en la puesta en práctica de la reiteración de las elecciones en tres jurisdicciones de Abuja.
Useni, jefe de gobierno del Territorio de la Capital Federal, ignoró la convocatoria a una segunda ronda electoral en esos tres gobiernos locales e instaló el 24 de marzo a los candidatos que, según él, resultaron "electos" el día 15 de ese mes.
Se trata de un abierto desafío a la NECON por parte de Useni, considerado el segundo hombre más poderoso del país detrás del presidente del régimen militar, general Sani Abacha.
"No habrá nuevas elecciones en el Territorio de la Capital Federal", dijo Useni el martes.
Los diarios nigerianos concluyeron que, si el militar logra imponer su posición, el NECON atravesará una crisis de credibilidad. (FIN/IPS/tra-en/ro/pm/mj/ip/97