El Parlamento Latinoamericano (Parlatino) cree llegada la hora de que la región se una para definir los problemas latinoamericanos al margen de influencias externas y para equilibrar el proceso de globalización.
América Latina "está madura" para tomar sus decisiones y por esa razón el Parlatino propondrá a los presidentes del área la determinación de estrategias comunes en materia de derechos humanos, lucha contra el narcotráfico, protección del ambiente, educación y democracia, entre otros asuntos.
La propuesta de crear una comunidad de naciones debería ser considerada en noviembre en Venezuela, cuando se reúnan los jefes de Estado y de gobierno de Iberoamérica (América Latina más España y Portugal).
Antes, y con el objetivo de definir la propuesta y la agenda a presentarse a los gobernantes, el Parlatino convocará al Comité de Alto Nivel de las cancillerías de América Latina.
El Parlatino se reunió el pasado fin de semana en Punta del Este, 150 kilómetros al este de Montevideo, para considerar la posible creación de una Comunidad Latinoamericana de Naciones.
Con ese objetivo llamó, en calidad de expertos, a tres antiguos ministros de Relaciones Exteriores y a Joao Baena Soares, ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La secretaría del grupo fue ejercida por el diputado brasileño Ney López y participaron del encuentro los ex cancilleres Gabriel Valdés (Chile), Sergio Abreu (Uruguay) y Augusto Ramírez Ocampo (Colombia).
Los latinoamericanos "debemos reunirnos para analizar nuestros problemas" al margen de otros países "como Estados Unidos, España o Portugal", dijo a IPS el diputado uruguayo Juan Adolfo Singer, presidente del Parlatino.
Los legisladores y los expertos coincidieron en que las naciones latinoamericanas deben dar forma institucional a una estructura de unidad que de hecho "ya existe".
Esa comunidad, argumentó Singer, se manifiesta a través de varios organismos multilaterales, y puede entonces evitarse el riesgo de superponer un organismo burocrático y costoso.
A juicio del parlamentario, América Latina desarrolla con singular éxito diversos procesos de integración, y por esa y otras razones tiene todas las condiciones para conformar la unidad real de la región.
"Nos unen múltiples aspectos culturales y sociales en común. Los uruguayos, por ejemplo, tenemos más razones de identidad con los indígenas bolivianos o peruanos que con los ciudadanos de Europa medioriental", observó el legislador.
Singer cree que América Latina debe tomar decisiones en común que le permitan defender sus intereses, sin considerar el tamaño o el podería económico de cada país.
"Debemos defender nuestros intereses sin ir contra nadie", dijo, y cuestionó el criterio de "certificaciones" utilizado por Estados Unidos para calificar a las naciones por su lucha contra las drogas "como de primera o segunda, según sus intereses".
El presidente del Parlatino considera que las reuniones de presidentes latinoamericanos permirtirán avanzar en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
"Si primero nos reunieramos con Cuba, luego sería mucho más fácil negociar todos juntos con Estados Unidos. En definitiva Cuba integra nuestro continente", argumentó.
Mientras, el proceso de globalización "nos lleva a perder parte de nuestra identidad, y lo que se busca es revalorizar la identidad latinoamericana y ubicar la discusión en determinados problemas, más allá de la globalización, de lo comercial y económico", dijo Abreu a IPS,
"Cuando la globalización arrasa, es necesario encender luces amarillas de alerta en el plano internacional para equilibrar, rescatando la identidad, sin dejarse arrastrar por los intereses exclusivamente comerciales", agregó el ex canciller uruguayo.
Participantes de la reunion informaron que en la misma se consideró básico abordar temas como la democracia, la educación, los derechos humanos y otros, en un ámbitos exclusivo de América Latina, para preservar los principios de solidaridad y unidad.
Durante el debate se consideró la posibilidad de otorgar a ALADI (Asociación Latinoamericana de Integración) un contenido político y social, además de comercial y económico, que le permita ser la base de la propuesta comunidad de naciones.
Pero la idea fue descartada por el ex canciller chileno Valdés. "No echemos vino nuevo en odres viejos", dijo. (FIN/IPS/rr/ff/ip/97
