El servicio de señales de la intendencia (alcaldía) de Montevideo colocó en los últimos 18 meses más de 20 semáforos en la ciudad, con lo que el total se elevó a 382, con la finalidad de ordenar el tránsito de la ciudad.
La mayor concentración de semáforos en Montevideo se encuentra en el centro de esta capital, donde se estima que circulan cada día más de 30.000 personas y cerca de 10.000 vehículos.
Escuelas, grupos de vecinos, centros comunales y hospitales son las instituciones que más pedidos de colocación de semáforos formulan a la intendencia. Muchas veces, las solicitudes sobrepasan las posibilidades de colocación, determinadas mediante estudios de especialistas.
"Por lo general hay cientos de pedidos que exceden nuestras posibilidades, así que damos prioridad a las necesidades más importantes", dijo Celia Lorik, directora del Servicio de Señales de la intendencia.
Las prioridades se determinan "por la cantidad de accidentes en el lugar, la peligrosidad de las esquinas, el flujo de tránsito, la cantidad de peatones y la velocidad de los vehículos", explicó la funcionaria.
El Servicio de Señales recorre todos los días las tres zonas en las que se divide la ciudad (este, centro y oeste) para cambiar las lámparas quemadas y avisar por radio desperfectos mayores.
"Si se trata de un desperfecto electrónico, va un técnico en electrónica. Si no, acude la cuadrilla con todos los elementos para la reparación", dijo Lorik.
El departamento también determina el tiempo que cada luz quedará encendida, que varía de acuerdo con el lugar y el flujo de tránsito en la zona. De ese modo, se procura controlar el exceso de velocidad de los autos que transitan por Montevideo.
"En el centro, establecimos que la velocidad máxima es de 30 kilómetros por hora. Si se dejan más de tres semáforos con luz verde de corrido, el conductor 'se embala' y sobrepasa esa velocidad", afirmó la jerarca.
El costo de un semáforo varían también según la complejidad de su emplazamiento. La intendencia paga por cada instalación de semáforos sencillos unos 12.000 dólares. Cuando se requiere dársena con hormigón (en los que habilitan para doblar a la izquierda) el costo puede elevarse a a 25.000 dólares.
El trabajo para colocar semáforos en la ciudad puede insumir entre uno y tres meses. La intendencia, junto a este trabajo de regulación del tránsito, lanzó una campaña para prevenir los accidentes y educar a peatones y conductores. (FIN/IPS/jlm/mj/pr/97
