AMERICA LATINA: Inflación mantiene tendencia declinante

Cuando restan sólo dos meses para el término del año, la inflación mantiene una tendencia declinante en casi todos los países de América Latina, con Venezuela como la excepción más preocupante y Brasil como el gran factor positivo.

El gobierno venezolano, que mostraba relativos éxitos en la batalla contra los precios desde junio, vio subir nuevamente en octubre la tasa mensual del índice de precios al consumidor (IPC) a 4,2 por ciento, frente a 3,6 por ciento en septiembre.

Se interrumpió así la tendencia declinante que mantenía el IPC en Venezuela, desde el récord de 12,6 por ciento en mayo, a 7,1 en junio, 5,0 en julio, 4,1 en agosto y el ya mencionado 3,6 por ciento de septiembre.

Así, octubre dejó vigente el interrogante de si los venezolanos lograrán cerrar 1996 con una inflación por debajo de la barrera simbólica de 100 por ciento, en tanto la tendencia anual del IPC fue hasta el último mes de 114,4 por ciento.

En la otra cara de la medalla, Brasil muestra tres meses seguidos de virtual estancamiento de la inflación, con un índice que en agosto fue de cero por ciento y creció levemente a 0,13 en septiembre y 0,22 por ciento en octubre.

El comportamiento de los precios en Brasil es el más determinante para medir el impacto de la inflación en América Latina, por tratarse del país más poblado de la región, con sus casi 160 millones de habitantes.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que calcula anualmente un índice inflacionario regional según una ponderación por habitante, cree que en 1996 ese indicador bajará a 22 por ciento, tras el 26 por ciento de 1995.

En 1994, cuando los brasileños soportaron una hiperinflación de 930 por ciento, elIPC ponderado regionalmente por Cepal fue de 340 por ciento.

Brasil, que en 1995 tuvo una inflación de 14,8 por ciento, muestra ahora una tendencia anual de 9,8 por ciento, lo cual lo proyecta como nuevo miembro del club de países con inflación de un dígito, que sigue creciendo en América Latina.

Según las tendencias consignadas hasta octubre, en el grupo con índice de precios inferior a 10 por ciento estarán este año con toda seguridad Argentina, Brasil, Chile, Panamá y Paraguay.

Bolivia, que fue la única nación con deflación en octubre, podría integrarse a ese club, al igual que El Salvador, Guatemala y Nicaragua, cuyos índices de precios son hasta ahora ligeramente superiores a 10 por ciento.

Perú, a su vez, tendrá este año un incremento de precios en torno de 12 por ciento, con una tasa de inflación moderada, al igual que Costa Rica, país donde se perfila un índice de 15 por ciento.

Este año los países de inflación relativamente alta, entre 20 y 30 por ciento, serán Colombia, Ecuador, Honduras, México y Uruguay, aunque algunos de ellos reclaman también logros antinflacionarios.

México reducirá a menos de 30 por ciento su IPC, que en 1995 fue de casi 52 por ciento, y Uruguay rebajará asimismo en unos 10 puntos la inflación, que el año anterior superó 35 por ciento.

Si se intenta una visión inflacionaria por bloques subregionales, se advierte que en la Comunidad Andina aparecen las mayores dificultades, marcadas fuertemente, pero no de manera exclusiva, por el caso de Venezuela.

Otros dos países andinos, Colombia y Ecuador, verán crecer este año su índice inflacionario respecto de 1995, mientras que en Perú y Bolivia, la tendencia de los dos últimos años apunta a la estabilización de los precios.

En el escenario centroamericano predomina las baja inflación de Panamá, El Salvador, Guatemala y Nicaragua, mientras en Costa Rica el alza de precios es menor que en 1995 y se mantiene una inflación relativamente alta en Honduras.

Las tendencias a la declinación se observan especialmente en el área del Mercado Común del Sur (Mercosur), sobre todo por la influencia que ejercen no sólo en el bloque, sino en toda la región, las economías de Argentina y Brasil.

Chile, socio del Mercosur desde octubre, se aproxima sin sobresaltos a su meta anual de 6,5 por ciento, ante 8,2 por ciento en 1995.

Paraguay, con su expectativa de un IPC de un dígito, y Uruguay, con la sustantiva baja de la inflación respecto del año anterior, terminan de configurar un escenario positivo para las estrategias antinflacionarias en el Mercosur. (FIN/IPS/ggr/ff/if/96

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe