La compañía alemana de aviación Lufthansa está "muy satisfecha" con la evolución de las operaciones comerciales realizadas en el último tiempo en América Latina como unidad regional, según la oficina de prensa y relaciones públicas de la empresa en Francfort.
Sin embargo, hay marcadas diferencias entre las rutas y destinos. Lufthansa vuela actualmente en América Latina a Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Bolivia, Ecuador, México, Perú y Venezuela, informó a IPS Claudia Weber, miembro de la empresa en Francfort.
Cóndor, compañía de vuelos charter, filial de Lufthansa, es la número uno en Alemania en el transporte de pasajeros a América Central y el Caribe con 15 destinos, una frecuencia de 27 vuelos semanales y un total de 421.000 pasajeros. La tendencia es al alza.
Los destinos continentales de Cóndor en esta región son Cancún y San José y en las islas figuran Antigua, Ciego de Avila, Barbados, Montego Bay, Nassau, Puerto Plata, Punta Cana, Santo Domingo, San Juan, Santa Lucía, Tobago y Varadero.
Lutfhansa, empresa parcialmente estatal, que expone como su orgullo una rigurosa puntualidad, transportó en 1995 alrededor de 32 millones de pasajeros en el servicio nacional e internacional, de los cuales 19,3 millones corresponden a vuelos internacionales.
De esta manera, la compañía germana es la segunda de su género en el mundo, a mucha distancia de British Airways, que el año pasado transportó 25 millones de pasajeros en su servicio internacional.
Luego siguen American Airlines (cerca de 16 millones), Air France (12,5), KLM (alrededor de 12) y United Airlines (unos 11 millones), según la IATA, la Organización Internacional de Transporte Aéreo.
Las grandes compañías aéreas internacionales obtuvieron en 1995 mayores beneficios que el año anterior.
La más exitosa entre ellas continúa siendo la compañía del sureste asiático Singapore Airlines con un 15,7 por ciento de incremento en el volumen de negocios. Luego siguen British Airways, la holandesa KLM y la escandinava SAS.
Lufthansa también pudo incrementar sus beneficios a 750 millones de marcos (unos 500 millones de dólares).
Sin embargo, en los primeros seis meses de este año Lufthansa perdió cerca de 250.000 pasajeros y alrededor de 47 millones de dólares de beneficios (70 millones de marcos), según admitió el presidente de la compañía, Hemjö Klein.
El ejecutivo alemán agregó que sus competidores, como British Airways, ofrecieron en ese tiempo tarifas reducidas hasta en 45 por ciento.
Asimismo, las subvenciones estatales que reciben compañías como Air France e Iberia, explicó Klein, también hacen mella en el principio la libre competencia que debe reinar en el tráfico aéreo civil.
En el transporte de carga Lufthansa mantiene una clara primacía con 918.000 toneladas, por delante de la agencia Federal Express de EE.UU. y de Korean Airlines. La British Airways figura en octavo lugar con alrededor de 500.000 toneladas.
De los casi 32 millones de pasajeros transportados por Lufthansa, 357.000 volaron de y a Latinoamérica, con exclusión de México. América Latina ocupó así el sexto lugar, el penúltimo, entre las regiones extranjeras servidas por la compañía.
En primer lugar figura Europa con 12 millones y medio de pasajeros, seguida de Norteamérica, incluído México, con 3 millones. En cuarto lugar está Asia con más de 2 millones de pasajeros, en quinto Africa con 596.000 y en séptimo lugar el Oriente medio con 230.000 pasajeros.
Por otro lado, en el servicio dentro de Alemania Lufthansa transportó algo más de 13 millones de personas.
El Estado posee 35,68 por ciento de las acciones de la compañía.
La privatización total y definitiva de la compañía estaba planeada para finales del presente o comienzos del próximo año. Pero el gobierno confirmó que pretende mantener una mayoría de acciones en manos alemanas.
Pretende limitar el porcentaje de acciones en manos extranjeras, con el argumento de que los tratados suscritos con otros Estados para concertar los derechos de despegue y aterrizaje exigen que Lufthansa esté al menos en 50 por ciento en posesión de ciudadanos alemanes.
En la actualidad, 80 por ciento de las acciones están en manos de alemanes, según el Ministerio de Transporte.
Aparte del Estado, otro gran accionista de la compañía es el pool bancario "MGL", formado por el Bayerische Landesbank Girozentrale, el Dresdner Bank y el Bayerische Landesbank fuer Aufbaufinanzierung, que reúnen 10,05 por ciento del paquete accionario.
El 49,3 por ciento de ese paquete está repartido entre muchos accionistas pequeños. Pero, de acuerdo con el diario germano Hannoversche Allgemeine Zeitung, Lufthansa está realmente dominada por varios consorcios alemanes, los caules poseen más de 50 por ciento del capital nominal.
En 1995, las operaciones comerciales del consorcio Lufthansa sumaron 13.260 millones de dólares (19.900 millones de marcos), cifras que equivalen un incremento de 5,6 por ciento con respecto a 1994, y arrojaron beneficios por 127 millones de dólares (191 millones de marcos).
Las rutas de Francfort a México, Bogotá y Lima y viceversa son calificadas por la empresa alemana de "muy buenas" y con perspectivas de crecimiento "muy positivas" para 1997. Así se explica que la compañía haya previsto para 1997 ampliar la capacidad de transporte hacia México, principalmente.
La ruta Francfort-México experimenta un fuerte incremento de viajes turísticos y de hombres de negocios, al tiempo que el transporte de pasajeros en general a Santiago de Chile sólo registra un alza moderada.
La fortaleza del peso argentino y el real brasileño hacen que ambos países sean considerados caros para efectos de turismo y por ello las tasas de crecimiento del transporte de pasajeros vía Lufthansa a ambos Estados son bastante discretas.
Venezuela también acusa hasta ahora un moderado incremento de pasajeros, según Weber.
Los vuelos de Francfort a Lima y viceversa se han duplicado desde mediados de 1995, debido, sobre todo, a que la propia Lufthansa reanudó sus vuelos a Lima y La Paz desde el pasado invierno septentrional.
Anteriormente, durante cuatro años, la compañía llevaba a sus pasajeros con destino a Quito, Lima y La Paz, desde Bogotá, por medio de la compañía Lloyd Aéreo Boliviano.
En la actualidad, Lufthansa ofrece a Latinoamérica vuelos directos de Francfort a Caracas, Buenos Aires, México y Río y a Santiago de Chile con una sola escala.
En la ruta Alemania-Brasil, la compañía tiene un acuerdo de vuelos con la compañía Varig, sistema que le permite ofrecer a los clientes de ambas empresas un servicio con mayores facilidades. (FIN/IPS/rc/jc/if/96