Un total de 13 empresas internacionales competiran por comprar la industria basica de aluminio en Venezuela, informo el estatal Fondo de Inversiones, que conduce el proceso de privatizacion.
Venezuela tiene dos plantas reductoras de aluminio primario, que producen 625.000 toneladas anuales, una procesadora de alumina, una explotacion de bauxita y una fabrica de anodos de carbon, integrando un complejo que se aspira entregar a manos privadas a comienzos de 1997.
El complejo se ubica junto a plantas de acero, de energia hidroelectrica y un puerto fluvial en el sureste, reune activos en el pasado valorados en 2.000 millones de dolares y arrastra deudas estimadas en 1.200 millones de dolares.
Los gigantes estadounidenses Alcan, Alcoa, Kaiser y Reynolds figuran entre los interesados, junto a las japonesas Mitsubishi y Marubeni y la noruega Norkhidro. Otros inscritos son Alumax, Glencor, Alentuy/Ormet, Cra Limited, Billington y Sural, esta ultima venezolana.
La decision del Estado es vender en bloque sus empresas de aluminio, la mas antigua de las cuales es Alcasa, que reduce unas 210.000 toneladas anuales y tiene a la estadounidense Reynolds como socio minoritario, con 7,3 por ciento de acciones.
La otra reductora, Venalum, tiene una capacidad instalada de 430.000 toneladas/ano, y un grupo de empresas japonesas, entre ellas Showa-Denko, Kobe Steel, Mitsubishi y Marubeni, controlan 19 por ciento de acciones.
El complejo opera ademas una mina de bauxita, que extrae mas de cinco millones de toneladas anuales del mineral y tiene reservas probadas para 40 anos, y una procesadora de alumina (bauxita oxidada como insumo para aluminio) que produce 1,6 millones de toneladas anuales.
Completa el cuadro Carbonorca, que produce al ano medio millon de toneladas de anodos de carbon, catalizadores en el proceso de elaboracion de aluminio a partir de la alumina.
Con los socios japoneses de Venalum ha surgido un obstaculo, porque pese a su condicion minoritaria disponen de poder de veto en cuanto al posible comprador de ese segmento de la industria.
Autoridades venezolanas despliegan negociaciones con los socios japoneses para remover su poder de veto, que coloca en ventaja dentro del proceso privatizador a Mitsubishi y Marubeni.
El Estado debe reservar para los 11.000 trabajadores del sector, segun la ley de privatizaciones, entre 10 y 20 por ciento de las acciones. (FIN/IPS/hm/dg/if/96