Denuncias de violación de los derechos humanos y de corrupción dominaron los últimos tramos de la campaña para las elecciones presidenciales de este jueves en Gambia, uno de los países más pobres del mundo, que intenta recuperar el sistema pluripartidista tras dos años de dictadura.
El coronel retirado Yahya Jammeh, presidente del régimen militar y candidato por la Alianza para la Reconstrucción y Reorientación Patriótica (APRC), señala vínculos de su principal desafiante, Ousainou Darboe, con el gobierno derrocado en 1994, que fue acusado de corrupción.
En cuanto a Darboe, del Partido Democrático Unido (UDP), atribuye al Consejo Militar Provisorio de Gobierno que encabeza Jammeh la violación de los derechos y libertades que la Constitución garantiza a la población.
"El pueblo de Gambia desea recobrar la dignidad y la libertad perdidas", declaró Darboe a IPS.
Jammeh, de 32 años, depuso mediante un golpe de Estado incruento el gobierno de Dawda Jawara, quien dominó el escenario político de este país de un millón de habitantes desde los años 60.
Según Darboe, que tiene 48 años, sus antecedentes en materia de derechos humanos desautorizan a Jammeh como aspirante a presidir un gobierno democrático.
Al respecto, señaló la actuación de la Agencia Nacional de Inteligencia que, según los críticos del régimen militar, ha sembrado el terror en el país.
Mientras, Jammeh consideró "faltos de sinceridad" los propósitos regeneracionistas de su adversario, y exhortó a los 450.00 ciudadanos habilitados para votar a negar su apoyo a Darboe.
El jefe de Estado de facto destacó que Darboe, presidente del Colegio de Abogados, defendió ante cortes marciales a funcionarios del gobierno civil derrocado en 1994 a quienes se acusó de corrupción y de manejo arbitrario de la justicia.
Jammeh abandonó en agosto el servicio militar activo para participar en las elecciones presidenciales. Al instalarse, el régimen militar proscribió a los partidos políticos y la medida todavía se aplica a tres organizaciones.
Los semanarios independientes han recogido versiones de amenazas contra la oposición y el diario The Point, de Banjul, publicó un informe de Amnistía Internacional relativo a la muerte en junio de 1995 del capitán Sadibou Haidara y del ministro de Finanzas Koro Ceesay.
Haidara, participante en el golpe de 1994, murió cuando estaba detenido, y el cadáver de Ceesay fue hallado entre los restos calcinados de automóvil. Según Amnistía Internacional, las autoridades no investigaron esos casos.
La campaña electoral fue perturbada también por enfrentamientos entre partidarios de la APRC y del UDP. Unas 50 personas resultaron lesionadas en el último choque, registrado el fin de semana.
También hay dudas acerca de la limpieza del proceso electoral, debido especialmente al dispar acceso de los candidatos a los medios de comunicación del Estado. La televisión concedió a Jammeh espacios más amplios que a sus adversarios.
Las autoridades argumentaron que debieron limitar la transmisión de mensajes de los políticos de oposición a causa del "inapropiado" lenguaje utilizado por éstos.
La Comisión Electoral Interina manifestó preocupación ante el asunto y pidió correcciones a las autoridades.
Así mismo, Jammeh volvió a proscribir a tres partidos políticos, entre los que se cuenta el Partido Popular Progresista, desplazado del poder por el golpe de Estado.
Gambia forma parte de la Organización de Unidad Africana (OUA) y de la Comunidad Británica de Naciones (Commonwealth), pero esas dos instituciones, que han promovido la realización de elecciones, no destacaron observadores para los comicios.
La ausencia de representantes de la OUA y de la Commonwealth será compensada parcialmente por 30 observadores internacionales, que deberán controlar el voto en los 582 centros de recepción.
Gambia mantuvo un régimen civil pluripartidario desde su independencia de Gran Bretaña en 1965 hasta el derrocamiento de Jawara.
Las críticas al régimen militar no son frecuentes en las calles. "No puedo decir nada, pues podría ser detenido. Esa es la situación", dijo Manjai, un habitante de Bakau, localidad situada a 13 kilómetros de Banjul.
Otros creen que aún el caso de triunfar Darboe, Jammeh no cederá el poder. No obstante, el jefe del gobierno de facto aseguró que respetará el resultado de las elecciones.
Darboe aseguró que garantizará el respeto de los derechos humanos. "El régimen militar erosionó los derechos y las libertades de nuestro pueblo, y los votantes saben que sólo el UDP puede normalizar la situación", manifestí a IPS.
Gambia, cuyo territorio cubre una franja de 11.300 kilómetros cuadrados en Africa occidental, figura entre las naciones más pobres del mundo. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) lo ubica en el puesto 162 entre 174 países clasificados por su desarrollo humano.
El alfabetismo no supera 40 por ciento entre los varones y 16 por ciento entre las mujeres, la esperanza de vida es de 44 años y el ingreso por habitante llegaba en 1992 a 370 dólares por año.
La campaña proselitista finalizó el martes y la Comisión Electoral Interina anunció que el viernes divulgará el resultado de los comicios. (FIN/IPS/tra-en/lf/kb/ff/hd ip/96