El presidente argentino, Carlos Menem, exhorto hoy a los representantes del oficialismo en el gobierno, el Congreso y las provincias a unirse en defensa del modelo economico y advirtio que, de lo contrario, el pais volvera al caos, a la hiperinflacion y al aislamiento.
Durante una cumbre del gubernamental Partido Justicialista, Menem pidio "fortaleza" a los dirigentes "para que nunca se repita la triste historia de 1955 (un golpe de Estado militar contra el justicialismo en el poder), para que nunca mas haya proscripciones, ni carcel, ni desaparecidos, ni torturados".
"Hemos reconquistado la democracia y la libertad. No perdamos esto que hemos logrado por meras rencillas internas. Los justicialistas tenemos que unirnos en esta cruzada impresionante, porque el enemigo acecha y si nos armamos con la verdad seremos invencibles", clamo.
En momentos en que su popularidad es la mas baja de su gestion, el presidente destaco logros en materia de economia, educacion, salud, seguridad y justicia, y en cambio no hizo referencia al desempleo o a la corrupcion, los costados mas criticados de su administracion que comenzo en 1989.
El auditorio estuvo conformado por legisladores del oficialismo en ambas camaras, gobernadores provinciales justicialistas, el gabinete de ministros y secretarios en pleno, y en cambio no asistio la cupula de la Confederacion General del Trabajo, pese a que se identifica con el justicialismo.
La central sindical estaba en el mismo momento deliberando sobre una nueva convocatoria a un paro general como el que se realizo en agosto contra el modelo economico, el alto desempleo (17,1 por ciento) y las ultimas medidas de ajuste.
Esta vez la huelga seria de 36 horas y con movilizacion callejera.
El secretario general de la central obrera, Gerardo Martinez, aliado del gobierno hasta hace pocos meses, se manifesto "preocupado" por el discurso del presidente, que rechazo toda critica, llamo "idiotas" a los opositores y reitero la necesidad de "defender" en bloque su modelo.
"No me van a correr con amenazas de huelga, les pido que me sigan acompanando en este proceso de transformacion porque si no solo queda el caos, el 5.000 por ciento de inflacion y Argentina otra vez aislada del mundo como en 1989 y antes tambien", advirtio el presiidente en su discurso.
Menem pidio a los justicialistas fuerza, unidad, organizacion pero priorizo la lealtad. "A algunos les di la mano y me la mordieron, pero les dare la otra, para que me la muerdan tambien", dijo en alusion a quienes pasaron en estos anos del oficialismo a la oposicion.
"No hay otra propuesta para este pais ni para America Latina, pero para seguir adelante con esta transformacion, necesito el apoyo logistico del justicialismo", remarco el presidente, refiriendose a las resistencias del oficialismo en el Congreso, donde se traban las iniciativas de ajuste.
Segun una encuesta de la consultora Gallup difundida hace una semana, Menem atraviesa el peor momento de popularidad. Solo 18 por ciento de los entrevistados confia en su gestion.
"Ya no se puede hablar de malhumor, hay un estado de fuerte protesta y se ve venir una mayor conflictividad", aseguro la sociologa Marita Carballo, directora de la consultora Gallup en Argentina.
Los consultados dijeron que el problema mas grave del pais es el desempleo, seguido de la corrupcion, pero el presidente no se refirio a ninguno de estos temas y en cambio destaco los logros y aseguro que durante su gobierno la pobreza bajo de 50 a 16 por ciento y la mortalidad infantil de 26 a 20 por mil.
"Los objetivos de salud se estan cumpliendo" y "nunca en este pais se invirtio tanto en educacion como en este gobierno", dijo. Hablo de "sumas fabulosas", "procesos revolucionarios" y "transformaciones impresionantes" para referirse a los logros educativos que menciono.
"?Que nos pasa ? ?Nos olvidamos que este gobierno elimino el servicio militar obligatorio, que dimos el 30 por ciento de cupo a las mujeres en el parlamento, del crecimiento de las economias regionales?", se pregunto, y pidio a los legisladores que el arbol no les impida ver el bosque.
El presidente admitio que "hay mucho por hacer", pero enseguida advirtio que son "desagradecidos" o "tienen mala fe" quienes pretenden senalar que su gobierno no transformo al pais en algo "infinitamente superior" a lo que heredo hace siete anos.
Destaco que los cambios se hicieron con "coraje, talento, voluntad y algo de suerte", y solo hizo referencia a "cosas feas" que tambien ocurrieron: "la muerte, la vejez prematura, enamorarse y no ser correspondido", puntualizo.
Agrego risueno que el estaba enamorado de todas las argentinas, arrancando el aplauso de su audiencia.
Observadores consideraron que el discurso revela "autismo" y resulta "riesgoso" en la medida en que niega la realidad de los problemas que enfrenta el pais, con un modelo economico que atraviesa dificultades fiscales y un fuerte desempleo, ademas de las protestas de la poblacion ante la corrupcion. (FIN/IPS/mv/dg/ip-pr/96