Dirigentes femeninas de México, Perú y Chile denunciaron hoy en esta capital los impactos negativos del proceso de globalización que se lleva a cabo en América Latina a través de los diferentes tratados y acuerdos comerciales.
La mexicana Patricia Fernández y la peruana Patricia Amat y León, de la red hemisférica "Mujer y Ajuste Estructural", afirmaron que en la región está aumentando progresivamente el fenómeno de la "feminización de la pobreza".
Fernández y Amat y León visitan Santiago con motivo de la creación de la red local "Mujeres Frente a la Globalización", que impulsará en Chile la discusión sobre las implicaciones económicas y sociales de la apertura comercial.
La red chilena está integrada por diez organizaciones que cuestionan la forma de asociación del país con el Mercado Común del Sur (Mercosur), que regirá desde el 1 de octubre, así como la negociación para adherir al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC).
"Nuestras iniciativas tienen por objetivo incorporar a mujeres de distintos sectores en la discusión sobre las implicancias que los tratados comerciales traerán para su sector y avanzar en estrategias de respuesta", dijo Coral Pey, de la Red Chilena por una Iniciativa de los Pueblos.
"Mujeres Frente a la Globalización" impulsará la elaboración de "una Carta Ciudadana, o plataforma básica sobre los derechos que los distintos sectores sociales deben plantearse frente a la suscripción de cualquier tratado comercial", agregó Pey.
Las dirigentes de México y Perú impugnaron el modelo neoliberal que, a su juicio, está orientando las políticas de apertura comercial tras los retrocesos económicos y sociales provocados por los programas de ajuste estructural.
"Estos impactos se traducen en aumento de la pobreza, presiones para bajar el costo de la mano de obra, deterioro del nivel de vida, desempleo masivo, pérdida de derechos laborales y de estabilidad, así como incremento del trabajo informal", dijeron.
En el caso específico de las mujeres, indicaron, se ocasiona "un aumento progresivo de empleos de categorías inferiores o feminización de la pobreza, concentración de trabajos con menos resguardos laborales y aumentos de los empleos eventuales y a domicilio".
La naciente red chilena está formada por organizaciones feministas, ambientales, sindicales, campesinas y de investigación en los campos de la comunicación social y la economía. (FIN/IPS/ggr/dg/pr-if/96