RUANDA: Renaciendo de las cenizas, como el ave Fénix

Los hoteles lujosos y mansiones relucientes que salpican el paisaje de la capital no reflejan la devastación económica en Ruanda, causada por las sangrientas guerras étnicas iniciadas en 1994.

No obstante, el conflicto y la situación que lo precedió ha dejado una cicatriz indeleble en esta nación centroafricana.

"Ruanda es un caso peculiar sin paragón en el continente y que tiene que ver con su historia más reciente", declaró Bisa Samari, del Programa de las Naciones Unidas sobre Desarrollo (PNUD).

El costo de la vida está por las nubes, mientras un informe del Ministerio de Planificación (Miniplan) señaló una alarmante caída en el ingreso por persona y, por consiguiente, en el valor adquisitivo de la población.

"Los cuatro años de guerra entre el régimen anterior y los rebeldes del FPR (Frente Patrióticoi Ruandés), que culminaron en el genocidio de casi un millón de personas, son culpables de la desgraciada situación actual", dijo Samari.

"Sin embargo, otros factores ya han comenzado a erosionar el crecimiento económico del país", apuntó.

Estadísticas de Miniplan demostraron que el Producto Interno Bruto (PIB), que en 1990 totalizó 2.140 millones de dólares, cayó en 1995 a 430 millones de dólares.

También desde 1990, los precios de la mayoría de los productos básicos se han triplicado y hasta cuadruplicado.

En el mercado de la capital, antes de la guerra un kilo de sorgo costaba 0,40 dólar, pero ahora su valor es de 1,60 dólar, mientras las arvejas, que se vendían a 0,50 dólar el kilo en 1990, valen dos dólares igual que las bananas.

"Esta situación se explica por la caída de producción" en la mayor parte de las cosechas, expresó una fuente responsable del Ministerio de Agricultura.

El país tambien sufrió una declinación en su ganado. Ruanda contaba con 819.000 cabezas de ganado en 1990 pero en 1995 se redujeron a 464.000, mientras el número de cabras bajo de 1,9 millones en 1990 a 397.000 en 1995.

El pueblo ruandés sigue soportando el peso de la declinación económica. Por ejemplo, por más de 15 años, los salarios de los empleados públicos se mantuvieron invariables y el reciente aumento del 20 por ciento no satisface sus necesidades diarias.

"Tome mi salario (cerca de 50 dólares), por ejemplo, se trata de un ingreso promedio para un empleado público. ¿Cómo se puede alquilar una casa y pagar cuotas escolares, víveres, medicamentos, agua y electricidad?", demandó una secretaria del Ministerio de Educación.

Un comerciante del mercado Nyarugenge dijo que si bien la gente estaba tratando de ganar algún dinero haciendo pequeños negocios, es muy difícil mantenerse al paso del creciente costo de la vida. "La vida ya no es aquella de los años '80, cuando todo era barato", comentó.

Hubo algunos esfuerzos por parte del gobierno y organizaciones no gubernamentales (ONGs) para ayudar a aquellos que se encontraban por debajo del umbral de pobreza.

Un proyecto, Ruanda III, iniciado por Assistance de Cooperation et le Recherche pour le Development (Acord), una ONG local, ayuda a mujeres que perdieron sus maridos durante el genocidio.

Tambien existen cerca de 100 asociaciones femeninas en el marco de la organización Pro Femme (Twese Hamwe, en vernacular Kinyarwanda), que les enseña a bastarse a sí mismas.

El gobierno ha revivido el Plan de Acción Social (PNAS), financiado por el Banco Mundial, para mejorar las condiciones de vida de la población, especialmente aquellos sectores más golpeados por la declinación económica, la guerra y el genocidio.

Durante los últimos ocho meses el PNAS ha financiado 130 proyectos de rehabilitación por valor de tres millones de dólares. Alrededor de 280.000 personas se beneficiaron con esas operaciones.

Samari cree que Ruanda tiene la capacidad para recuperarse de sus dificultades económicas, siempre que haya paz y estabilida en el país.

"… Eso requiere buen gobierno, evitar sectarismos y resentimientos políticos, la participación popular en los mecanismos de decisión y la canalización de su disponibilidad para lograr autodesarrollo. Eso es lo que debe entenderse como desarrollo humano", afirmó. (FIN/IPS/tra-en/jbk/jm/pm/ego/if).

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