Mientras Alemania conmemora el 450 aniversario de la muerte de Martín Lutero, el gran reformador religioso, los empresarios descubren en él un motivo de atracción turística.
"Deseamos transformar la Reforma en una experiencia viviente para todos aquéllos que estén interesados", explicó Hans-Peter Sommer, iniciador y presidente de la asociación "Sitios de la Reforma", creada en Eisleben en 1994 por la Unión del Turismo Europeo, una iniciativa privada.
Eisleben, en Alemania oriental, es la ciudad donde Lutero nació el 10 de noviembre de 1483 y murió el 18 de febrero de 1546. Junto con Wittenberg, la ciudad universitaria donde el reformador enseñó, se ha ganado el título de "Ciudad de Lutero".
El líder de la reforma protestante vivió durante un tiempo significativo al menos en 16 ciudades de la actual República Federal Alemana, y todas ellas se enorgullecen al autodenominarse "Ciudades de Lutero".
Una de ellas es Wartburg, cerca de Eisenach, donde Lutero pasó unos 300 días en su confortable "prisión del caballero". Allí fue enviado por el elector Federico el Sabio en mayo de 1521, que salvó de esa forma su vida y el movimiento reformista.
Bajo la custodia del castillo de Wartburg, Lutero estaba fuera del alcance de la excomunión papal y la proscripción imperial. Vestido con ropas comunes y haciéndose pasar por "el señor Joerg", tradujo el Nuevo Testamento al alemán en no más de 10 semanas.
El turismo forma parte importante de la economía de la región de Eisenach. Sólo en Wartburg hay unos 100 empleos en el área turística, mientras en Eisenach y sus alrededores cientos de personas más dependen de esa actividad.
Pero la Unión del Turismo Europeo, con sede en Eisleben, pretende ir más allá, reuniendo a todos los "sitios de la Reforma" de Europa, explicó Sommer.
Estos sitios incluyen todos los lugares donde Lutero y otros reformadores como Calvino, Melanchthon, Zwingli, Muentzer, Erasmo o Hus cambiaron la sociedad con su pensamiento revolucionario, criticando las estructuras políticas y cruzando fronteras con sus innovadores ideales religiosos.
La ruta turística se extendería desde Trondheim, en Noruega, a través de Suecia, Dinamarca, Gran Bretaña, Países Bajos, Francia y Suiza, quizá hasta Hungría y Polonia.
Los iniciadores del programa pensaron principalmente en Estados Unidos y Canadá como potenciales fuentes de turistas para la "ruta de la reforma", pero también en los países escandinavos, desde donde ya se realizaron 55.000 reservas en lo que va del año, según el Centro Alemán para el Turismo.
La industria turística de Wittenberg, el lugar de mayor actividad de Lutero, reconoce que la figura del reformador atrae multitudes. En el primer semestre del Año de Lutero hubo muchos más visitantes en la ciudad que el año anterior, señaló Stephan Schelhaas, director de la oficina turística local.
Pero los turistas no sólo son atraídos por las iglesias, los monumentos y las Casas de Lutero, sino que todo esto debió ser complementado con la organización de diversas exposiciones, conciertos y obras de teatro.
?Qué pasará luego del Año de Lutero? Según la Unión del Turismo, aún hay mucho más para celebrar: en 1997 se cumple el 500 aniversario del nacimiento de Melanchthon, en 1998 el de Ulrich von Hutten, 1999 marcará el 435 aniversario de la muerte de Calvino, y en el años 2000 Lutero y Caterina von Bora hubieran celebrado su aniversario número 475. (FIN/IPS/tra-en/raj/fn/ml/cr-if/96
