Estados Unidos se opone a una propuesta presentada en el Consejo Económico y Social (ECOSOC) de la ONU para elaborar una convención mundial contra el lavado de dinero, y en su lugar prefiere fortalecer el cumplimiento de los acuerdos regionales ya existentes.
La propuesta fue presentada por México y Colombia en el actual período de sesiones del ECOSOC, y cuenta con el apoyo de Portugal y Alemania.
"Sería más productivo concentrarse en el cumplimiento de los ya vigentes acuerdos regionales en lugar de establecer una convención mundial", expresó en el ECOSOC la delegada de Estados Unidos, Jane Becker, en una reunión realizada esta semana.
"La elaboración de una nueva convención podría sobrecargar a los gobiernos, que ya están luchando para cumplir con los compromisos vigentes a nivel regional", añadió.
Ya el año pasado, Washington detuvo una propuesta de México para realizar una conferencia mundial de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) dedicada al combate a la producción y venta ilícita de narcóticos.
Fiel al propósito de suspender la organización de conferencias mundiales para reequilibrar las finanzas de la ONU, la delegación estadounidense sostuvo que no se justificaría realizar la cumbre propuesta por México.
El delegado permanente de Pakistán, Ahmad Kamal, refutó este viernes las estimaciones de la ONU que cifran en 120.000 millones de dólares por año el tráfico de drogas en todo el mundo. "Esa cantidad no es creíble y tampoco está actualizada", expresó ante el ECOSOC.
La ministro de Justicia de Irlanda, Nora Owen, dijo que el lavado de dinero socava las estructuras económicas legales y distorsiona el sistema mundial de comercio.
Irlanda, que asumirá la presidencia semestral de la Unión Europea la próxima semana, se propone dar prioridad al control del tráfico de drogas. Según Owen, las ganancias de este mercado ilegal están estimadas en 300.000 millones de dólares.
Tanto México como Australia afirmaron que las ganancias del tráfico de estupefacientes pueden ser mayores que las del mercado del petróleo y de las industrias bélicas. Se estima que sólo el comercio mundial de armas llega a los 800.000 millones de dólares al año.
"Existe un nexo entre el comercio de narcóticos y el tráfico clandestino de armas, el crimen internacional, la corrupción y el lavado de dinero", afirmó en el ECOSOC el delegado de Australia, Richard Butler.
Otra propuesta presentada en el presente período de sesiones del ECOSOC solicita que la Asamblea General de la ONU celebre en 1998 una sesión especial para discutir problema mundial de las drogas. (FIN/IPS/tra-en/td/yjc/arl/ip/96