Gran Bretaña y sus 14 socios de la Unión Europea (UE) alcanzaron hoy un acuerdo para el progresivo levantamiento del embargo a la carne vacuna británica, poniendo fin a una crisis que amenazaba obstaculizar la conferencia cumbre de Florencia.
La solución de la crisis abre paso al debate en la reunión de Florencia, comenzada este viernes, de asuntos prioritarios como la búsqueda de soluciones al desempleo en el área de la UE, que afecta a 19 millones de personas.
El canciller británico Malcolm Rifkind anuncio el cese del boicot a la UE, que su gobierno aplicaba en respuesta al embargo sanitario impuesto el 27 de marzo a las exportaciones de carne de su país como consecuencia de la epizootia de "las vacas locas".
La "no cooperación" británica se expresó durante la crisis en el voto contrario a todos los proyectos que exigían unanimidad para su aprobación.
La base del acuerdo alcanzado es un programa marco para la eliminación gradual del embargo a la carne británica presentado por la Comisión Europea, órgano ejecutivo de la UE.
El convenio permite la exportación de carne bovina británica a países ajenos al área de la UE. Las partidas deben destinarse exclusivamente al mercado interno del comprador y sólo podrán exportarse con el aval de los comités veterinario y científico del bloque.
La intervención directa de los jefes de Estado y de gobierno de la UE permitió resolver la crisis de las "vacas locas" y salvar la cumbre de Florencia de un eventual fracaso, temido hasta la víspera por la obstrucción británica de decisiones comunitarios.
El primer resultado de la vuelta a la normalidad de las actividades fue el desbloqueo de la convención para la creación de Europol, primer núcleo de la futura policía de investigaciones europea.
Asimismo, se reanudaran las negociones para un acuerdo de cooperación política y económica entre la UE y México.
La negociación que pondría fin al conflicto comenzó en las primeras horas de este viernes, antes de la inauguración formal de la cumbre, con una conversación entre los primeros ministros John Major, de Gran Bretaña, y Romano Prodi, de Italia, y el presidente de la Comisión Europea, Jacques Santer.
El acuerdo esta contenido en 14 líneas del proyecto de conclusiones de la cumbre y en una declaracion emitida por la presidencia de la UE, que Italia desempeñará hasta el fin de la conferencia de Florencia, previsto para este sábado.
Los 15 socios otorgaron su asentimiento al programa marco preparado por la Comisión Europea para combatir la enfermedad de las "vacas locas", y las medidas que Gran Bretaña ya ha tomado o tomará en el futuro "llevarán a la reduccion paso a paso del embargo de las exportaciones britanicas hacia la UE y a los terceros países", según se consignó.
Las decisiones de la Comisión Europea se "basarán exclusivamente en consideraciones de tutela de la salud pública y en criterios científicos objetivos y serán tomadas en base a los procedimientos existentes, escuchando por lo tanto al Comité Veterinario y a los altos especialistas de la UE", se explicó.
En su declaracion, la presidencia Italiana aclaró que, entre tanto, los pedidos de carne británica efectuados por terceros países, que sólo pueden destinarse al consumo interno del comprador, serán examinados por la Comisión en base a los normales procedimientos y despues de haber consultado a los respectivos comites cientificos y veterinarios".
Por su parte, Gran Bretaña aplicará el plan adoptado el miércoles por unanimidad por el comité veterinario de la UE.
El plan prevé la matanza por etapas de cerca cuatro millones de vacunos, 150.000 de los cuales serán sacrificados de inmediato.
Gran Bretaña también realizará un registro de bovinos y eliminará las provisiones de pienso que pudieran estar infectadas.
El origen de la fiebre de las "vacas locas" o encefalopatía espongiforme bovina fue atribuído a raciones que incluían huesos y carne de oveja. (FIN/IPS/jp/ff/ip/96)
