China mantiene una fría actitud hacia Taiwan en vísperas de la toma de mando del primer presidente electo democráticamente de este país, con la intención de restar importancia al hecho, o, sugieren analistas, quizá se trate de la calma que precede a la tormenta.
Pero lo más probable, señalan observadores, es que el actual silencio sea reflejo de una lucha de poder en el interior de la dirigencia china, dividida ante la política a adoptar en relación a Taiwan.
Lee Teng-hui asumirá el lunes la presidencia de Taiwan, cuya legitimidad fue confirmada por una aplastante victoria en las primeras elecciones presidenciales de Taiwan, realizadas el 23 de marzo.
Aunque Lee podría revelar nuevas concesiones sobre posibles negociaciones de reunificación, analistas asiáticos y occidentales en Beijing no esperan un cambio radical en la posición de Lee, quien está dispuesto a retomar el diálogo, pero no si China sostiene un arma contra su sien.
China rechazó recientemente la propuesta de Taiwan para reiniciar las negociaciones canceladas tras la visita de Lee a Washington, en junio del año pasado.
Desde entonces, y en particular en vísperas de las elecciones de marzo, China realizó una serie de ejercicios militares intimidatorios en el estrecho de Taiwan, para advertir a Taipei que cualquier paso conducente a la declaratoria de independencia, o futuros intentos en esa dirección serían aplastados violentamente.
Pero los ejercicios militares no socavaron el respaldo a Lee en las elecciones, y aunque tras la votación China mantuvo su retórica hostil, en las últimas semanas enfrió sus ánimos.
No obstante, los analistas sostienen que el tema de Taiwan mantiene el primer lugar en las discusiones de la dirigencia china, convirtiéndose en el centro de una lucha interna en preparación del cambio de mando.
Los conservadores, con el respaldo de algunos generales del Ejército Popular de Liberación (PLA), pelean por mantener la línea dura del gobierno hacia Taiwan, y advierten sobre el peligro de la influencia política y económica extranjera.
"La batalla entre el socialismo y el capitalismo aún se libra en la arena internacional. Quién gana y quién pierde aún debe resolverse", se indicó en un documento atribuido a altos funcionarios cercanos a Deng Liqun, ideólogo conservador y crítico de las reformas de mercado del máximo líder, Deng Xiaoping.
En el lado opuesto se oyen las voces moderadas lideradas por el presidente Jiang Zemin, que parecen haber ganado la delantera tras el fiasco de las elecciones de Taiwan.
Un reconocido analista vinculado al Partido Comunista dijo que "las filas de quienes mantienen una posición más dura hacia Taiwan se han reducido desde la elección. Todos esperan que Lee Teng-hui ofrezca concesiones y evite nuevas confrontaciones".
Beijing pretende una moratoria al pedido de Taipei de mayor reconocimiento internacional, especialmente su intento de reingresar a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y reanudar los viajes de Lee al exterior.
Asimismo, China pretende lazos directos con Taiwan, que ahora canaliza la mayor parte de su comercio e inversiones a través de Hong Kong.
En China hay unas 25.000 empresas fundadas por taiwaneses, con inversiones de más de 20.000 millones de dólares. Esto presiona al propio gobierno de Taipei para la apertura de vías directas de comunicación y transporte.
Aislado del continente desde 1949, Taiwan reabrió los viajes y el comercio a través de un tercer país o territorio a fines de la década de 1980. Todas las cargas embarcadas deben pasar por un tercer puerto, en general Hong Kong, y se altera el curso de las llamadas telefónicas.
Taipei ha sugerido la reanudación de conversaciones semioficiales con China, y que levantaría las restricciones a los viajes e intercambios entre altos funcionarios.
Pero una cruzada que Taiwan no está dispuesto a abandonar es la integración a la ONU, mientras circulan informaciones de que Lee seguiría provocando a China utilizando los aeropuertos de Estados Unidos como salida de sus viajes internacionales, e intentaría ganar el apoyo de Tokio para un viaje a Japón. (FIN/IPS/tra-en/rc/cpg/lp/ip/96)