La leyenda cuenta que en la Edad Media San Jorge (Sant Jordi en catalán), patrono de Cataluña, liberó a una princesa del cautiverio de un dragón.
La sangre de la bestia muerta se convirtió en una rosa, que el santo entregó a la princesa. San Jorge es así quien inicia la tradición de regalar una rosa a la amada.
Sin embargo, cuando en 1923 la corporación del libro de Barcelona decidió proclamar el "día de Sant Jordi" como el "día del libro', más bien pensó en los escritores Miguel de Cervantes, William Shakespeare y en el Inca Garcilaso de la Vega, que murieron el 23 de abril de 1616.
También la Asamblea General de la Organización de las Naciones para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) del 15 de noviembre de 1995 declaró el 23 de abril como "día mundial del libro y del derecho de autor", en honor a estos tres grandes escritores se informó este viernes en Bonn en rueda de prensa.
Al encuentro asistieron Joan Guitart i Agell, Ministro de Cultura del gobierno autónomo de Cataluña, Peter Canisius, presidente de la Comisión Alemana de la UNESCO, y Hans Friewald, miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Editores y Libreros Alemanes.
"En la historia los libros son el medio más importante para la difusion y preservacion del conocimiento", explica la resolución de la vigésimoctava conferencia general de la UNESCO.
"La lectura nos abre el mundo de la ciencia, de la educación, del entretenimiento, pero también nos presenta las cosas hermosas de este mundo. Además, nos permite la convivencia, entender al prójimo, sus ideas y sus pensamientos', expresó Canisius.
Cada cuatro años se realiza en junio el congreso de la Unión Internacional de Editores. Este año se realizará en Barcelona y con motivo de la fiesta de Sant Jordi, los organizadores lograron adelantar el encuentro a abril.
Así nació la iniciativa de proclamar el 23 de abril "día internacional del libro". España, Argentina, Chile y Cuba presentaron esta idea ante la UNESCO, la que contó con apoyo internacional.
En Cataluña, durante el "día de Sant Jordi" se confunden las tradiciones. El hombre le regala una rosa a su amada, mientras que ella le entrega un libro. La rosa es el símbolo de la belleza y del amor, en tanto el libro representa sabiduria, cultura e inteligencia.
Actualmente nadie se rige por estos roles. Todos los catalanes se regalan durante este día un libro, o un libro y una rosa.
Este 23 de abril muchos países del mundo celebrarán el día mundial del libro.
En Alemania los actos se concentrarán en las ciudades de Berlín, Bonn, Braunschweig, Leipzig, Mannheim, Wiesbaden y Wolfenbuettel. Las 100 librerías alemanas participantes en este encuentro regalarán una rosa y un marcador de libros a sus lectores, donados por el gobierno catalán.
El gobierno autónomo catalán dispuso 1,5 millones de dólares para la campaña de promoción mundial, destinados a Alemania, Andorra, Argentina, Chile, Colombia, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Irlanda, Italia, Japón, y México.
Además de rosas y material informativo, la campaña publicitaria contempla publicar en diferentes periódicos la imagen de algún gran escritor de cada país, como Goethe en Alemania, con la leyenda "Hoy sería catalán" y una explicación del significado de ese día.
Por su parte, la asociación de editores y libreros alemanes repartirá carteles con motivo del "día mundial del libro y del derecho de autor".
"La idea es motivar a la población a leer más, y a apreciar más los libros", comentó Hans Freiwald.
Destacó la importancia de fomentar la lectura, porque a pesar de que el mundo de la electrónica está ganando en importancia, todo el mundo debe saber leer y "también quien quiera adquirir la informacion de los bancos de datos', señaló.
Según una investigación demoscópica entregada por la asociación de editores y libreros alemanes, 42 por ciento de los encuestados lee libros varias veces al mes, 13 por ciento lo hace una vez al mes y 45 por ciento casi nunca.
Los jóvenes leen más que los mayores. El 56 por ciento de las personas entre 14 y 24 años lee libros varias veces al mes, mientras que entre los mayores de 50 lo hace sólo 35 por ciento.
Las mujeres leen más que los hombres. El 42 por ciento leen un libro, frente a 48 por ciento de los varones.
Freiwald hizo énfasis em el problema del derecho de autor, al indicar que "los autores se ven enfrentados a una falta de leyes nacionales e internacionales que protejan sus derechos".
"El día del libro nos permite apelar ante el Gobierno Federal y ante la Unión Europea para que hagan todo lo posible para asegurar a los autores y editores una mejor protección de la propiedad intelectual también en un mundo con rápidos cambios en la tecnología", concluyó Freiwald. (FIN/IPS/mr/ag/cr/96)
