El Banco Central de Paraguay violó de nuevo normas establecidas para operar en el convenio de pagos de ALADI, después de haber cancelado casi 27 millones de dólares al Banco Central de Uruguay por operaciones fraudulentas de banqueros locales el año pasado, informó hoy el diario Noticias.
Cinco bancos nacionales fueron rehabilitados por el instituto emisor para continuar operando en el marco del convenio de pagos recíprocos de ALADI (Asociación Latinoamericana de Integración), con sede en Montevideo, pese a que la sanción impuesta había sido de 90 días.
El directorio del Banco Central redujo la pena a sólo 30 días.
Las entidades sancionadas habían sido desplazadas temporalmente de la lista oficial de bancos que operan en el convenio, tras descubrirse que no informaron operaciones internacionales concretadas el año pasado.
La sanción de 90 días está establecida en el manual de procedimiento del propio Banco Central de Paraguay para los pagos a través de ALADI, pero el directorio decidió rebajar la penalización a sólo 30 días.
Estos bancos presionaron para ingresar de nuevo a ALADI, antes del plazo, porque deben realizar operaciones importantes con los países vecinos en momentos en que se inician las exportaciónes de la cosecha gruesa de algodón y soja, según el diario de Asunción.
Entre los motivos de la rebaja de pena se consideró el hecho de que los bancos pagaron de sus propios recursos las operaciónes realizadas con desconocimiento del Banco Central, sin afectar las reservas internacionales del país, según Germán Rojas, gerente de operaciónes internacionales del instituto emisor.
Otros dos bancos, actualmente intervenidos, habían utilizado también el sistema de ALADI sin informar al Banco Central de sus operaciónes, resultando en un fraude que costó a las reservas casi 27 millones de dólares.
Bancopar y Bancosur fueron dos de las entidades financieras intervenidas que no informaron al Banco Central sus operaciones internacionales entre 1993 y 1995, que resultaron ser fraudulentas. Ambos bancos se encuentran ahora sin licencia de las autoridades para operar.
El Banco Central se enteró recién a mediados del año pasado de estas operaciónes, debiendo cargar con la deuda impagada al Banco Central del Urugauy, por un total de 26,7 millones de dólares, cancelada en enero pasado.
A través de una estructura de fraude muy bien montada, los directivos de ambos bancos transfirieron varios millones de dólares a sus cuentas personales abiertas en las islas Caimán.
Los bancos estaban en la lista oficial de ALADI de entidades habilitadas, a pesar de presentar serios problemas en sus estados contables. Esto lo sabía el Banco Central, que continuó autorizando las operaciones en ALADI.
La irregularidad volvió a presentarse ahora, cuando el Banco Central permitió que otros cinco bancos sigan operando en el convenio ALADI, a pesar de haber violado las normas, lo que comprueba que "la estructura del fraude sigue intacta" en Paraguay, afirmó Noticias. (FIN/IPS/ct/ag/ip-if/96)