Luego de reunir a todas las mujeres en una sola organización, los grupos femeninos de Panamá han orientado sus acciones hacia la educación formal e informal como vehículo para que la mujer logre una mayor cuota de poder en la sociedad.
Mariela Arce, directiva del unitario Foro Mujer y Desarrollo, señaló a IPS que a pesar de todo lo que se ha avanzado en los últimos años sobre los derechos de género, "aún hay mucha ignorancia y opciones cortoplacistas y tradicionales en cuanto a la mujer".
Entre los logros más importantes se encuentran la creación, a propuesta del Foro, de la estatal Oficina Nacional de la Mujer a propuesta del Foro Mujer y Desarrollo, y el hecho de que por primera vez en la historia del país las mujeres van a celebrar "su" día internacional en forma unitaria.
Arce recordó que previo a las elecciones de mayo de 1994, el Foro Mujer y Desarrollo recomendó a los partidos políticos que incluyeran por lo menos 30 por ciento de mujeres entre sus candidatos a puestos de elección. En la mayoría de los casos la propuesta fue aceptada.
Sin embargo, subrayó que recientemente hicieron ese mismo planteo a una comisión oficial encargada de revisar el código electoral, pero ese organismo "ni siquiera lo tomó en cuenta", destacó.
Indicó que esa aparente incoherencia existente en las esferas de poder sobre el papel de la mujer en la sociedad tiene que ser contrarrestada por "una propuesta más integradora que contribuya a una nueva forma de enfocar el poder".
Subrayó que el plan nacional de desarrollo que elabora el Foro Mujer y Desarrollo "tiene que ver con espacios políticos en salud, en educación, trabajo, vivienda y legislación".
La independencia, salud reproductiva, mayor injerencia en los programas y políticas de desarrollo, más libertad de expresión y seguridad para ejercer con plenitud todos sus derechos humanos, fueron identificados por Arce con una condición indispensable para el acceso de la mujer al poder.
Sin embargo, advirtió que la elaboración de un plan nacional de desarrollo no es suficiente para concretar esas aspiraciones.
"No sólo se debe conseguir el acceso a cargos, sino que hay que cambiar las estructuras caducas de la sociedad" a través de una mayor educación y concientización de la mujer y el hombre, dijo.
Puso como ejemplo que 80 por ciento de los maestros y profesores son mujeres. "Sin embargo, este sistema patriarcal ha hecho de nosotras las mujeres su máximo producto por excelencia", estimó.
"Somos lo más especializado en cuanto a producto ideológico. Ningún esclavo se creó sus propias cadenas y sin embargo nosotras todos los días remachamos un poquito más esas cadenas", aseguró.
Explicó que varios grupos del Foro Mujer y Desarrollo llevan a cabo actualmente proyectos piloto de formación de maestros y profesores con el fin de "buscar los orígenes y los focos de donde se nutre esa deformación cultural".
El proposito es "que ellos lleven un mensaje distinto a sus compañeros de profesión y a los niños".
El objetivo es "que se reconstruyan los géneros, pues ésa es una aberración socio-histírica de que la mujer tiene determinado papel y el hombre otro, cuando el único género que tiene que existir es el género humano", señaló.
El Foro Mujer y Desarrollo también trabaja con las autoridades del Ministerio de Educación para crear un nuevo currículo no sexista en los textos de estudio, así como contenidos de información sobre salud sexual y reproductiva con miras a romper "prejuicios y moralismos" sobre el tema.
Estos esfuezos también se encaminan hacia la educación universitaria, según indico a IPS la profesora Aracelys de León, directora del Instituto de la Mujer de la estatal Universidad de Panamá.
De León señaló que actualmente las mujeres superan a los hombres por sus estudios académicos pero que esa proporción no guarda relación en materia de salario y cargos de dirección cuando la mujer ingresa al mercado de trabajo.
De acuerdo con estudios oficiales, la panameña gana en promedio las tres cuartas partes de lo que recibe un varón por la misma tarea.
Una situación similar ocurre en el acceso a los empleos. Según datos oficiales, 12,8 por ciento de hombres 1 22, 6 por viento de mujeres son víctimas del desempleo abierto.
A su vez, quienes tienen empleo son en 71,4 por ciento hombres.
De León adujo que esos datos confirman que, pese al mayor acceso de las mujeres a la educación secundaria y universitaria y a que "tienen mucha vitalidad y mucha fuerza" en el estudio y el trabajo, "lo cierto es que hay una discriminación en el empleo que constituye una violación de sus derechos". (FIN/IPS/sh/dg/pr/96)