El gobierno de Chile descartó la posición del sector agrícola, para facilitar la negociacion de libre comercio con el Mercado Común del Sur (Mercosur), lo cual podría provocar la renuncia del ministro del área, afirmaron hoy fuentes del sector privado.
El diario El Mercurio señaló que la delegación chilena a la ronda de conversaciones que se realiza en Buenos Aires aceptó finalmente negociar el capítulo agrícola para lograr acuerdo con Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay antes del 31 de este mes.
La reunión de Buenos Aires debía concluir este miércoles, pero se prolongó para discutir la demanda chilena de que Argentina elimine la llamada tasa de estadística, un gravamen extra arancelario.
Los negociadores mantienen esperanzas en que la negociacion finalice antes de la visita que el presidente chileno Eduardo Frei realizará a Argentina, en abril.
Fuentes del sector privado citadas por El Mercurio aseguraron que el gobierno de Frei ignoró la petición del presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Ernesto Correa, de mantener la protección al sector.
La delegación chilena a la reunión de Buenos Aires habría renunciado a su posicion original de no fijar plazo para la plena incorporacion de la agricultura al sistema de libre comercio negociado, removiendo así uno de los principales escollos en la negociación con el Mercosur.
Según informes extraoficiales, Chile estaría dispuesto a acordar periodos de desgravación agrícola entre 15 y 18 años para que los productores chilenos se adecuen a la competencia del Mercosur.
Fuentes del sector privado, citadas por el diario, afirmaron que el ministro de Agricultura, Emiliano Ortega, "estaría a punto de presentar su renuncia" como consecuencia del cambio de la posición chilena.
El presidente de la SNA señaló el miércoles que Ortega se mantiene partidario de incluir en las listas de excepción a los productos agrícolas en la negociación del Mercosur y fustigó duramente algunos planteamientos de Argentina.
Aludió al rechazo argentino a la inclusión de algunos productos agrícolas chilenos en las listas de excepciones, así como a las trabas para el ingreso a los mercados del Mercosur de exportaciones de este país, como pasta de tomate, frutas y vino.
"Argentina está presionando en una forma que, por decirlo de alguna manera, considero muy curiosa", dijo Correa.
En su opinión, el mercado chileno no es la principal aspiración de Argentina en las actuales negociaciones, sino que su propósito consiste en asegurarse una puerta de salida al océano Pacifico para alcanzar otros mercados.
Correa formuló un llamado a las autoridades chilenas para que mantengan su postura proteccionista en materia agrícola.
Para el presidente de la SNA, las listas de excepción al libre comercio deberán mantenerse por lo menos durante diez años, al cabo de los cuales se revisaría la situación imperante.
Según los últimos informes, el principio del "congelamiento" de las excepciones fue desechado por el gobierno argentino, que aceptaría en cambio largos plazos de desgravación para rubros s agrícolas sensibles. (FIN/IPS/mjc/ff/ip/96)